Sánchez prepara otro sablazo: quiere eliminar las deducciones a las familias en la reforma del IRPF
La cuenta atrás para la rebaja de las deducciones del IRPF ha comenzado y desde el Gobierno lo denominan oficialmente como “Proceso de revisión del gasto 2019”
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno en funciones, ha prometido gastar mucho más de lo que le permiten los ingresos reales del Estado y ha asegurado en plena campaña electoral que no subirá el IRPF a las clases medias: sólo lo elevará para los “ricos”. Sin embargo, el jefe del Ejecutivo sabe que no es posible obtener grandes dosis de recaudación de los contribuyentes con mayores rentas debido a la escasez de ellos, ya que en España menos de un 4% declara rentas superiores a 60.000 euros. Por eso, el socialista piensa obtener el resto de recaudación de las clases medias.
Con este fin, Sánchez ha pedido un informe para analizar la “efectividad” actual de todas y cada una de las deducciones que se aplican en el IRPF, entre ellas, las que afectan a las familias y, en especial, a las familias numerosas. A partir de ahí, como reconoce en los documentos remitidos a Bruselas por el Gobierno, decidirá si se quedan las deducciones o pasan por la tijera elevando los impuestos de las familias.
La cuenta atrás para la rebaja de las deducciones del IRPF ha comenzado y desde el Gobierno lo denominan oficialmente como “Proceso de revisión del gasto 2019”. Así figura en los documentos remitidos a Bruselas por el Gobierno de Sánchez. Un plan para justificar un aumento de recaudación un tanto increíble: 95.505 millones de euros de aumento del pago de impuestos total de aquí hasta 2022, tal y como ya ha publicado OKDIARIO.
Esos documentos oficiales señalan que ha finalizado ya “la primera fase del proceso de revisión del gasto público”, una fase centrada, según la versión del Gobierno, en reducir gastos superfluos de la Administración. Y ahora toca la segunda fase que «se desarrollará durante 2019”. El documento recuerda que “mediante Acuerdo de Consejo de Ministros de 14 de diciembre de 2018, se han identificado las áreas de trabajo sobre las que versará esta fase” y una de las que se ha sometido a revisión es precisamente la que se conoce como “Beneficios Fiscales”.
Éstos son instrumentos de política fiscal que persiguen determinados objetivos económicos o sociales “mediante ahorros o mejoras en la renta de personas físicas y jurídicas a través de reducciones en sus cuotas tributarias”, tal y como destaca el documento. “Conllevan, por tanto, una minoración de la recaudación tributaria”, reconoce el Gobierno sin matices. Y, por ello, “conocer su efectividad resulta crucial para poder diseñar un sistema tributario que alcance sus objetivos de manera óptima”.
Es decir, de manera traducida, si el equipo de Sánchez considera que no son “efectivas” las deducciones, las quitará. “En concreto», detallan, «se van a evaluar 13 beneficios fiscales, que ascienden a unos 57.187 millones de euros: seis vinculados con el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, tres relativos al Impuesto sobre Sociedades, tres en el ámbito del Impuesto sobre el valor Añadido y uno en Impuestos Especiales”.
Y entre esos mecanismos de ahorro fiscal que se han puesto en cuarentena figuran las deducciones a las familias, en especial, a las familias numerosas.
Fuentes consultadas por este diario apuntan a que el objetivo final es reducir esas deducciones para las familias con ingresos superiores a la media. Y hay que recordar que la media en España es una media modesta: de menos de 30.000 euros de renta bruta anual. Es decir, que las familias de clases medias tienen todas las papeletas para pagar el exceso de gasto prometido electoralmente por Sánchez.