La reunión Junts-PSOE en Zúrich para salvar la legislatura acaba «como el rosario de la aurora»

La esperada reunión entre el PSOE y Junts en Zúrich (Suiza) ha terminado como «el rosario de la aurora», según ha podido saber OKDIARIO de fuentes cercanas a la negociación. La crisis entre ambas formaciones no ha tenido un final navideño. Los representantes independentistas -Carles Puigdemont, Míriam Nogueras y Jordi Turull- han abandonado el encuentro con visible malestar tras acusar al Gobierno de Pedro Sánchez de incumplir la gran mayoría de los acuerdos alcanzados, cumpliendo apenas 6 de los 30 compromisos firmados. Así, Santos Cerdán, al que Sánchez le ha encargado la relación con Junts, y ex jefe de Gabinete de Rodríguez Zapatero, José Enrique Serrano, suman un nuevo fracaso de cara a una legislatura que huele a pólvora para los socialistas.

El encuentro, que se enmarca en las reuniones mensuales que ambas formaciones mantienen en territorio helvético desde hace más de un año, ha evidenciado el deterioro de las relaciones entre los socios de investidura. Las tensiones, que ya venían manifestándose en las últimas semanas, han estallado definitivamente durante la cita suiza, poniendo en riesgo la estabilidad del Gobierno y la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado.

Fuentes cercanas a la negociación indican que la formación independentista ha expresado su profundo malestar por lo que consideran una «falta de voluntad real» por parte del Ejecutivo para cumplir con lo pactado. Entre los puntos de fricción, destacan el alcance de la ley de amnistía, la transferencia de competencias en materia de inmigración y la desclasificación de documentos relacionados con el atentado de Las Ramblas.

Junts y PSOE en Zúrich

La ruptura de las negociaciones en Zúrich podría tener graves consecuencias para la legislatura, especialmente, después de que Míriam Nogueras, portavoz de Junts en el Congreso, ya advirtiera esta semana sobre la posibilidad de no negociar los Presupuestos. Esta crisis abre un nuevo escenario de incertidumbre política que solo parece tener una vía de solución: la intermediación directa de Carles Puigdemont, figura clave en los momentos más críticos de la relación entre ambas formaciones.

El PSOE, por su parte, mantiene su discurso oficial de que «el Gobierno cumplirá sus compromisos», aunque la realidad en la mesa de negociación parece distar mucho de esta afirmación, según las fuentes consultadas. La pelota queda ahora en el tejado de Moncloa, que deberá buscar fórmulas para reconducir una situación que amenaza con descarrilar la legislatura apenas comenzada.

Cuestión de confianza

La reunión se producía después de que, tras una reunión con la Ejecutiva Nacional de su formación en Bruselas, el líder de Junts hubiera exigido que Sánchez se someta a una cuestión de confianza en el Congreso, argumentando que «no es de fiar». La formación independentista ya ha registrado formalmente esta petición en la Cámara Baja, una iniciativa que, según recoge la Constitución, podría desembocar en la dimisión del Gobierno si el Congreso niega su confianza al presidente.

En su comparecencia desde Bruselas, Puigdemont realizó un demoledor balance del primer año del acuerdo de investidura. «El Gobierno no ha hecho lo suficiente para merecer nuestra confianza, a pesar de que hemos sido pacientes y generosos», ha declarado el líder independentista. Entre los incumplimientos destacados, Puigdemont ha señalado especialmente el fracaso en la oficialidad del catalán en Europa, acusando a Sánchez de priorizar pactos con Orbán y Meloni para asegurar cargos europeos para el PSOE.