Marjaliza acusa a Granados del chivatazo de Púnica sin pruebas y reconoce el pago de comisiones
El denominado ‘cerebro de la trama Púnica’, David Marjaliza, ha afirmado que el exconsejero madrileño, Francisco Granados, le instó a «destruir documentos un día de niebla», tras recibir el soplo de que les estaban investigando, sin aportar pruebas.
Marjaliza ha realizado estas acusaciones durante la tercera sesión del juicio sobre el chivatazo del Guardia Civil, José Manuel Rodríguez Talamino, que se celebra en la Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional, que ha quedado visto para sentencia.
Según Marjaliza, él comenzó a «recoger todo» junto con su secretaria Ana María Ramírez, y buscaron en internet un día de niebla. Un mes después, asegura, en la primera semana de octubre de 2014, vino «un amigo a recogerlo y a quemarlo, Eduardo de la Peña». El empresario no había desvelado hasta este jueves la identidad del presunto destructor de los documentos al que describe como «un ñapas que nos hace las cosas de los pisos, las goteras, nos arregla todas esas cosas».
Ha añadido que en total fueron «tres carros del Carrefour» llenos de «documentación de la Comunidad de Madrid y licitaciones», así como un cuaderno escolar en el que apuntaban las entradas y salidas de dinero en B procedente de comisiones ilegales y en el que detallaban las cantidades, las fechas, los políticos a los que iba destinado el dinero y la localidad madrileña que gobernaban. De todo ello, tampoco guarda ningún elemento de prueba que apuntale su testimonio.
Marjaliza ha negado haber pactado con la Fiscalía y ha añadido que ayudó a pagarle a Granados la campaña de 1999 y de 2003, «le he pagado viajes a Ibiza, televisiones, escopetas y muchas cosas» señalaba.
El presunto ‘cerebro’ de la trama Púnica, ha admitido que, en la época en la que operó la red en municipios de la Comunidad de Madrid, pagó comisiones a «alguna que otra decena» de políticos de todos los partidos, cuya identidad no ha desvelado al estar todavía abierta la investigación.
Aunque no ha querido nombrar a ninguno de esos políticos a los que dio sobres con dinero B procedente de comisiones ilegales, ni tampoco decir si éstos continúan en política, Marjaliza ha dicho que «puede» que alguno de ellos no esté investigado actualmente en el caso Púnica.
Sí que ha reconocido que no eran solo del PP, sino que procedían «de todos» los partidos políticos, si bien ha excluido a Podemos y a Ciudadanos, que en esas fechas (la trama salió a la luz en 2014) todavía no regentaban cargos públicos en la Comunidad de Madrid.
Por su parte, la secretaria de Marjaliza, Ana María Ramírez, ha declarado a continuación siguiendo la misma línea de acusación que su jefe, asegurando que ambos estuvieron durante una semana buscando documentación y que incluso pasaron un fin de semana en la oficina mirando «exhaustivamente» qué es lo que había en el despacho.
La petición de la Fiscalía
La Fiscalía ha pedido hoy que el exconsejero madrileño, Francisco Granados, y los otros dos acusados de haberle alertado con un chivatazo de que le estaban investigando, indemnicen conjuntamente a la Guardia Civil con 3.170,30 euros por los gastos que les ocasionó este soplo.
La Fiscalía ha cuantificado esta indemnización al exponer sus conclusiones definitivas, en las que ha mantenido su petición de tres años de cárcel por un delito de revelación de secretos para Granados y el agente de la Guardia Civil, José Manuel Rodríguez Talamino, que fue el que supuestamente le dio el soplo en una discoteca de Valdemoro.
Para el único que ha modificado la fiscal sus conclusiones provisionales es para el guardia civil en excedencia y exasesor de Granados, José Luis Caro Vinagre, para el que sigue pidiendo los tres años de cárcel, pero ha planteado al tribunal la posibilidad de condenarle de forma alternativa por cooperación necesaria en un delito de revelación de secretos, lo que le supondría una pena de 18 meses de cárcel.