El líder de Podemos que sufrió la paliza denunciado por aceptar 6.000 € para poner de nº2 a su amante
Guillermo Pérez, el abogado que fue detenido y puesto en libertad por la policía junto a su hijo por la paliza al líder de Imagina Podemos, Fernando Barredo, le había denunciado días antes por haber aceptado 6.000 euros de un empresario para colocar a la esposa de éste de número dos en sus listas. La mujer, de nombre Heidi, se convirtió a la postre en amante de Barredo.
OKDIARIO ha tenido acceso a la denuncia que el abogado interpuso el pasado 24 de julio en la que se relata lo sucedido anteriormente a la agresión. Según Pérez, «Barredo le reconoció que llevaba haciendo vida de pareja con Heidi desde hace seis meses y que había recibido 6.000 euros del marido de Heidi para la campaña electoral de Imagina Podemos Castilla-La Mancha». Esta información ha sido desmentida, en reiteradas ocasiones, por Barredo en distintos medios de comunicación.
En la acusación se relata también que «Barredo le propuso organizar una campaña de acoso y derribo contra Manuel Vázquez», el empresario casado con Heidi y que presuntamente pagó para que colocasen a su mujer en el segundo puesto de las listas de la corriente crítica con Pablo Iglesias.
Guillermo Pérez alega que su reunión con Barredo «era en calidad de mediador» y que sus intenciones no eran otras que «llegar a un entendimiento en relación al divorcio contencioso entre Heidi y Manuel». A continuación, aclara que «es amigo común de ambos y letrado en familia», lo que le llevó a acudir esa noche a casa de Barredo e intentar llegar a un acuerdo.
Heidi, sin embargo, no estuvo presente en el encuentro en el cual el abogado y el líder de Imagina Podemos, Fernando Barredo, intentaban acordar una solución sobre el divorcio entre ella y su marido.
“Va diciendo por ahí que es agente del CNI, y me ha dejado 5.000 euros de deuda por mis servicios como abogado”, comentó a OKDIARIO el propio Pérez.
“Barredo quería que Heidi sacase más dinero del divorcio”, comenta el letrado. “Yo no quise formar parte de ese montaje con Barredo, que encima me debía 5.000 euros por 40 horas de mi trabajo”, asegura. “En el momento en el que yo le dije que no, él me dijo que no tenía miedo de Manuel porque era agente del CNI y coronel de los Reales Tercios de España”, sentencia el sospechoso de la paliza.