Aznar sostiene que «la cogobernanza» en la pandemia que esgrime Sánchez es «una filfa»
El ex presidente critica la "costumbre" que se está "arraigando de aplazar las elecciones" porque se está "jugando con la libertad"
El ex presidente del Gobierno José María Aznar ha resaltado este lunes que la «cogobernanza» a la que apela continuamente Pedro Sánchez en la pandemia es «una filfa». Además, ha subrayado que ese «taifismo disparatado» que ha impulsado el Ejecutivo ha llevado a que no cumpla con su responsabilidad de establecer un plan nacional de vacunación.
Esas han sido sus palabras en un acto organizado por el Aula de Liderazgo del Instituto Atlántico de Gobierno y la Universidad Francisco de Vitoria, en el que ha participado el ex presidente de Colombia, Andrés Pastrana. Entre los asistentes al acto estaban el líder opositor venezolano Leopoldo López, el ex alcalde de Caracas Antonio Ledezma y el eurodiputado del PP Leopoldo López Gil.
Las vacunas y el «taifismo disparatado»
En su intervención José María Aznar ha afirmado que España «no es que tenga un problema de mal gobierno o de desgobierno» sino que «ha descubierto» la fórmula del «no gobierno». «La cogobernanza es una filfa que significa el ‘no gobierno’», ha enfatizado.
Tras insistir en que un país puede tener un Gobierno «desastroso», «calamitoso» o «magnífico» pero no puede estar sin un Gobierno, ha criticado que el Ejecutivo de Sánchez haya impulsado un «taifismo disparatado» en España y le ha preguntado si es «tan difícil articular un plan nacional de vacunación», algo que, a su juicio, forma parte de la «responsabilidad elemental» de un Ejecutivo cuando dispone de las vacunas contra el Covid-19.
Además, ha criticado que «la mayoría» del Gobierno cuente con Bildu, que está apelando a «formar parte de su partido a los terroristas encarcelados por asesinato», en alusión a las cartas que Arnaldo Otegi ha enviado a presos de ETA invitándoles a afiliarse. «¿Eso es el ejemplo para nosotros? ¿Qué criticamos de lo que pasa en otros sitios?», se ha preguntado.
Contra el aplazamiento de las elecciones catalanas
A renglón seguido, el ex presidente del Gobierno ha puesto sobre la mesa otro ejemplo que, a su juicio, afecta a las libertades como es el aplazamiento de las elecciones catalanas, que estaban previstas para el 14 de febrero.
«Cuidado con esta costumbre que se va arraigando de aplazar las elecciones», ha asegurado, para advertir que se está «jugando con una cuestión fundamental que es la libertad». Dicho esto, se ha preguntado: «¿Qué hubiesen dicho los que más tienen que callar si Trump hubiese decidido aplazar las elecciones en Estados Unidos por el mismo motivo, en un país en el que hay 4.000 muertes diarias por el virus?».
A preguntas de los alumnos del Aula de Liderazgo, José María Aznar ha señalado que los retos de España hoy pasan por «rehacer la nación»; «rehacer el Estado»; «reconstruir la economía y la base social de España»; y «colocar otra vez a España entre los países influyentes del mundo». «Con esas cuatro cosas puedes trazar un programa político y una acción política que frene muchas de las cosas que estamos viviendo en este momento», ha proclamado.
Crítico con las redes sociales que han anulado las cuentas de Trump
Por otra parte, Aznar se ha mostrado crítico con el hecho de que Twitter y otras redes sociales hayan optado por anular sus cuentas al presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump. «Es un tema delicado», ha reconocido, ya que se trata de empresas privadas que también son un monopolio, por lo que ha instado a prestarle atención, puesto que «afecta de manera determinante a las libertades».
En este sentido, ha defendido que no se puede ser «plataforma y partido» al mismo tiempo y ha puesto como ejemplo que «si vas a coger un tren no te pueden impedir de usarlo por razón de tu pensamiento político». Además, ha incidido en la paradoja de que estas empresas usan las redes telefónicas que «no pueden prohibir a una empresa como Twitter la utilización de sus redes» pero estas compañías sí pueden «puede prohibir la cuenta del presidente de la telefónica si no le gusta».
Asimismo, Aznar ha expresado su preocupación por el auge del populismo en América Latina, empezando por México y pasando por Bolivia, Argentina y Brasil, donde hay un «populismo de radicales derecha», así como la existencia de una «narcodictadura» en Venezuela, y ha subrayado que Colombia es la excepción. En este sentido, ha subrayado que si este país cayera en manos del populismo «la posibilidad de recuperación de la región sería muy preocupante y delicada».