Un informe técnico del propio Gobierno alerta del desastre de la política de detección de contagios de Sánchez
"Se desconoce si la intensidad de la transmisión a partir de personas asintomáticas será igual que a partir de personas con síntomas", sostiene el documento


Fernando Simón y el propio Pedro Sánchez no dejan de afirmar que todas las decisiones oficiales sobre el coronavirus y los contagios se han basado en criterios científicos. Y es un bulo más.
Un informe del propio Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, dirigido por Fernando Simón y fechado el pasado 17 de abril incluye la siguiente frase: «La identificación de casos potencialmente transmisores de SARS-CoV-2 no puede realizarse basándose en la presencia de síntomas ya que los casos asintomáticos y presintomáticos pueden tener un papel muy importante en la transmisión».
Mientras, la consigna general en materia de utilización de test del propio Ministerio de Sanidad mantiene la siguiente orden: «En general, las pruebas diagnósticas solo se realizarán en pacientes sintomáticos», reflejada en el documento oficial para la utilización de los test rápidos del departamento del ministro Salvador Illa.
Y es así, además, aunque por el camino el Gobierno haya hablado de supuestos cribados de la población con test masivos a los asintomáticos. Porque lo cierto es que nos acercamos a la desescalada del confinamiento y los cribados no aparecen por ningún lado.
El informe en cuestión procede del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias que dirige el propio Fernando Simón. Su título es “INFORMACIÓN CIENTÍFICA-TÉCNICA. Enfermedad por coronavirus, COVID-19”.
Y en ese estudio técnico se señala sobre los contagios con claridad que «se desconoce si la intensidad de la transmisión a partir de personas asintomáticas será igual que a partir de personas con síntomas, aunque la carga viral detectada en un caso asintomático fue similar a la de otros casos sintomáticos, efecto que ha podido también ser observado en un modelo animal (34,40)».
El estudio destaca, de hecho, que «en modelos matemáticos basados en los brotes epidémicos de Singapur y Tiajin (China), se han estimado proporciones de transmisión a partir de casos presintomáticos de 45% (IC95% 32-67) y 62% (IC95% 50-76) respectivamente (41)». Los paréntesis corresponden a la cita de los estudios científicos en los que se basan, que son recopilados al cierre del informe.
«En la fase inicial del conocimiento de la enfermedad, aunque la transmisión comunitaria era inexistente o muy baja, el desconocimiento de la transmisión de la infección a partir de casos asintomáticos pudo generar casos entre sanitarios indebidamente protegidos», admite igualmente.
Carga viral
Y prosigue el estudio afirmando en relación con los contagios, con respecto a la situación en residencias de ancianos, que «la carga viral de los que resultaron positivos fue similar, independientemente de que desarrollaran o no síntomas». Por lo que, el estudio subraya que «en conclusión, estos hallazgos tienen gran importancia a la hora de implementar medidas de control de la infección. La identificación de casos potencialmente transmisores de SARS-CoV-2 no puede realizarse basándose en la presencia de síntomas ya que los casos asintomáticos y presintomáticos pueden tener un papel muy importante en la transmisión».
La afirmación viene avalada por varios estudios internacionales, todos ellos previos, obviamente: «Kimball A. Asymptomatic and Presymptomatic SARS-CoV-2 Infections in Residents of a Long-Term Care Skilled Nursing Facility — King County, Washington, March 2020. MMWR. Morb Mortal Wkly Rep [Internet]. 2020 [citado 4 de abril de 2020];69. Disponible en: https://www.cdc.gov/mmwr/volumes/69/wr/mm6913e1.htm».
Todo ello, contradice la estrategia de detección de focos de contagio del Gobierno, basada en que «las pruebas diagnósticas solo se realizarán en pacientes sintomáticos», tal y como recoge la ‘GUÍA PARA LA UTILIZACIÓN DE TESTS RÁPIDOS DE ANTICUERPOS PARA COVID-19’.