La Gestora baraja la expulsión de Sánchez como última opción si no acata las reglas de las primarias
Pedro Sánchez podría ser inhabilitado como candidato a las primarias del PSOE si se resiste a acatar las reglas de la Gestora, como está ocurriendo con el sistema de financiación.
Los reglamentos del PSOE son claros al advertir de que los candidatos deben aceptar las reglas fijadas por el partido. De hecho, ya en el artículo 27 del propio reglamento de afiliados se establece que todo aquel que «viole las obligaciones que a todos los miembros del Partido imponen nuestras normas será sancionada, previos los trámites reglamentarios y mediante decisión de los órganos competentes, con medidas que podrán llegar a la expulsión en aplicación de las normas internas vigentes».
Aunque fuentes de la dirección aseguran que ése no es, hoy por hoy, el escenario y que tratarán de evitar una solución dramática, la posibilidad está en el aire. La dirección estaría legitimada.
Sánchez redobló ayer miércoles el pulso con la Gestora al resistirse a aceptar su sistema de financiación de la campaña y que se basa en una cuenta corriente de titularidad compartida con Ferraz. La dirección recurrió a un burofax para advertirle de que ese era el único modo de financiación permitido de acuerdo a la ley y que, por tanto, no podría continuar con su crowdfunding. Sánchez, en cambio, solo se lo planteará, en su caso, una vez arranque oficialmente el calendario congresual. Esto es, cuando formalmente sea candidato, en el Comité Federal que los socialistas celebrarán el próximo 1 u 8 de abril.
Si el pulso con la Gestora continúa, ésta podría tomar medidas drásticas, incluso la inhabilitación de Sánchez por entenderse que vulnera las reglas establecidas y aceptadas para las primarias.
«No responderemos ante sus problemas legales»
De hecho, el argumento en el que insiste la dirección es que Sánchez podría estar incurriendo en un delito de financiación ilegal que acabe implicando a todo el partido. Algo a lo que, desde luego, no están dispuestos. «No vamos a responder ante los problemas legales que pueda encontrarse un candidato», advierten.
En fuentes ‘pedristas’ consideran que la Gestora únicamente trata de «hacer ruido» para «deslegitimar» a Sánchez. «Si lo inhabilitan únicamente provocarían aún más a la militancia», sostiene incluso uno de sus más estrechos colaboradores.
El principal punto de conflicto es que Sánchez quiere preservar el anonimato de sus donantes y se remite a la Ley de Protección de Datos para no facilitar sus identidades. La Gestora, por su parte, interpreta que eso supone una vulneración de la ley, y un posible delito de financiación ilegal. Algo que sería «muy grave», sostienen en Ferraz.
Aceptó las reglas en 2014
«Aquí hay un medidor muy claro de la actitud que tiene cada uno. Y es que tanto Patxi como Susana han aceptado estas reglas. Esto es un pulso a la Gestora sin argumentos», rebaten en la dirección socialista.
De hecho, fuentes críticas con el exlíder del PSOE recuerdan además cuando, en las primarias contra Eduardo Madina, Sánchez acató las mismas reglas de financiación que ahora critica. «Un sinsentido», consideran, «el anterior crowdfunding se hizo como propone la Gestora. Y Pedro no se quejó por nada. ¿Por qué ahora sí? Si no tiene nada que ocultar, que lo enseñe», añaden. La resistencia de Sánchez alimenta entre sus críticos la idea de que su campaña pueda estar financiada por empresas con intereses en la candidatura (lobbies) o, incluso, por afines a Podemos.
Para rebatir esa tesis, el equipo de Sánchez reveló este martes que las donaciones más numerosas a su campaña (el 60 por ciento) son las de entre 10 y 20 euros, lo que le ha permitido recaudar 19.450 euros (un 23,5% del importe total). Sólo cuatro aportaciones se incluyen en el tramo de entre 301 y 610 euros.
El equipo de Sánchez sostiene que las donaciones de menor cuantía corresponderían a particulares y no así a empresas con intereses «espúrios» en la candidatura, como apuntan las sospechas. Hasta el pasado 19 de marzo, se habían recaudado mediante crowdfunding un total de 82.800 euros.
La Gestora basa su rechazo a este sistema de financiación en que la actuación de los precandidatos, aún no siendo oficiales, se considera actividad del partido, y, por tanto, estaría sujeta a la Ley de Financiación de Partidos, que prohíbe las donaciones anónimas. Según ese informe, si se comete alguna irregularidad, el responsable sería el PSOE.