La fundación de la Junta que pagaba puticlubs se quedó con 1,3 millones de una ayuda a Delphi
Este dinero todavía no ha sido justificado por el Gobierno andaluz
Gastan 32.000 € en 12 “juergas en puticlubs” con una tarjeta ‘black’ de la Junta
La extinta Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe), la entidad de la Junta de Andalucía que gastó dinero público en puticlubs, se quedó con 1,3 millones de una subvención otorgada por la Consejería de Empleo para la ejecución de la cuarta fase del plan de formación de los ex trabajadores de Delphi. Así se desprende la auditoría externa que realizó la empresa ATD y que fue remitida por el propio Gobierno andaluz a la Comisión de investigación sobre los cursos de formación en el Parlamento autonómico.
La auditoría analizó de forma aleatoria sólo 12 de 55 subvenciones que recibió la Faffe en 2009, 2010 y 2011, coincidiendo con los mandatos de Manuel Chaves y José Antonio Griñán. De esas doce subvenciones, sólo dos corresponden a formación profesional para el empleo, que es donde se concentran las presuntas irregularidades de la Faffe». Y de esos dos expedientes, uno corresponde a dicho programa formativo de Delphi, que también ha sido cuestionado por la Cámara de Cuentas de Andalucía. El caso Faffe está siendo investigado por el Juzgado de Instrucción 6 de Sevilla y la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil por el presunto manejo fraudulento de 50 millones de euros en ayudas a la formación.
De los 8.962.972 euros concedidos en el presupuesto definitivo de dicho expediente, con fecha de 29 de marzo de 2011, el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) -que asumió las funciones de la desaparecida Faffe desde mayo de 2011- justificó al auditor «a efectos informativos» que se habían realizado pagos por un importe de 8.653.814,09 euros, quedando un remanente de casi 309.000 euros.
Sin embargo, de esos 8,6 millones de euros hubo una parte que no fue a parar directamente a la formación de los ex trabajadores de Delphi, sino que acabó en las arcas de la polémica fundación que dirigió Fernando Villén. En concreto, fueron 1,3 millones repartidos entre dos conceptos: 800.000 euros por «dirección y coordinación» y 570.021,17 euros por «administración y gastos generales» (a esto último se añade un remanente de 242.863,25 euros).
Se da la circunstancia de que la entidad que se encargaba de estos cursos de formación no era propiamente la Faffe, sino la Fundación Universidad Empresa de Cádiz, como se acordó en el expediente, recibiendo por su servicio un importe total de 3,5 millones de euros. Así mismo, el equipo docente ingresó 1,3 millones de euros y se otorgaron becas de «especialización de perfiles profesionales» por un montante de 2,2 millones.
Sin desglose de gastos
De esta manera, con esos 1,3 millones de euros que gestionó la Faffe para costear ‘trabajo propio’, esta entidad pública engordó su chequera. La fundación se convirtió en toda una agencia de colocación para dirigentes del PSOE andaluz, familiares y amigos. Todavía está por conocer el detalle de cada uno de los gastos en sendos conceptos («Dirección y coordinación» y «Administración y gastos generales»). La auditoría externa remitida a la Comisión de investigación del Parlamento andaluz no entró en esta cuestión. «Las actuaciones administrativas necesarias hasta la finalización del expediente son posteriores al 4 de mayo de 2011, fecha de extinción de la Fundación y, por tanto, no son objeto de análisis en el presente informe», indicó la empresa ATD.
Por su parte, el análisis de la Cámara de Cuentas de Andalucía alertó de diversas «incidencias» en esta ayuda concedida a la Faffe por la Consejería de Empleo. El órgano fiscalizador detectó lo siguiente: «No se justifica su carácter excepcional; incongruencias en fechas de distintos ítems del procedimiento; haber autorizado que la actividad subvencionada se ejecutara parcialmente por la Fundación Universidad Empresa de Cádiz, incumpliendo la normativa; se han ejecutado 308.977,91 euros menos de lo concedido; no constan la memoria de actividades, el desglose de gastos, el listado de participantes, ni el informe del auditor (interno); y se contemplan becas por asistencia y gastos de transporte que no son acordes a lo establecido en las órdenes reguladoras».