Diputados del PSOE bromean con la ‘carta bomba’ de Sánchez: «Yo sólo he recibido un christmas de Pedro»
Escepticismo y cierta incredulidad en las filas del grupo parlamentario socialista con el supuesto ‘sobre bomba’ que Pedro Sánchez recibió el pasado 24 de noviembre. Es la primera ocasión que el líder del PSOE es destinatario de un sobre de estas características que, previamente, han recibido con formato similar otros miembros de su gabinete como Fernando Grande-Marlaska o Reyes Maroto o la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Entre los diputados socialistas, algunos se lo tomaban este jueves a broma: «Yo la única carta que he recibido es un christmas de Pedro», decía un parlamentario, asegurando entre risas que «mejor no abrirla, no vaya a llevar una bala». Moncloa ha informado de lo sucedido siete días más tarde, mediante una filtración y no en un comunicado o en una rueda de prensa como en casos anteriores.
«No todo es lo que parece», sostenía otro diputado y colaborador cercano a Sánchez durante la pausa para el almuerzo en el Congreso de los Diputados. A todos les sorprendía que «tuvieran esto en silencio durante una semana». La excusa de «no generar alarma social» con un sobre bomba, que puso Moncloa para justificar el haber ocultado un hecho tan grave a la Justicia y a la opinión pública, es «poco creíble» para algunos compañeros de partido. «Cuando las balas a Marlaska, el espionaje al presidente y a varios ministros o la navaja a Maroto se salió muy rápido a informar del tema» recordaba uno de estos diputados. Algún tema incluso ya se ha archivado judicialmente. En esta ocasión se ha optado por el silencio. Incluso no dando traslado de forma inmediata a los tribunales de lo sucedido, según relató el secretario de Estado de Interior Rafael Pérez Ruiz.
Y es que el episodio de los sobres con material pirotécnico es el enésimo capítulo de supuestos ataques y amenazas contra destacados miembros del Gobierno y del PSOE que siguen sin resolverse. En la mayoría de casos, a excepción de este último sobre bomba destinado al presidente, el Ejecutivo ha salido muy rápido a victimizarse ante la opinión pública. Presentando sendas denuncias ante la Audiencia Nacional cuyo resultado sigue todavía sin dar una explicación ni unos responsables de estos actos constitutivos de un delito de amenazas. Por ahora el único hecho probado en todo este tiempo es el de un ex vigilante de seguridad de Tarrasa (Barcelona) que fue condenado a casi nueve años de prisión por trazar, según el tribunal sentenciador, «un plan, con una víctima concreta y una petición de ayuda» a terceros para asesinar al presidente del Gobierno.
Temas:
- Pedro Sánchez
- PSOE