Los violentos CDR atacan una mesa informativa de VOX en Barcelona
Los violentos CDR han reventado la mañana de este sábado una mesa informativa de VOX en Barcelona. Los separatistas, entre quienes también había miembros de Òmnium Cultural, han atacado la mesa en la que miembros del partido de Santiago Abascal ofrecían información a los ciudadanos.
Los CDR, a quienes el president de la Generalitat, Quim Torra, ha animado públicamente llamándoles «amigos» e instándoles a que «no aflojen», se presentaron en el acto de VOX exigiendo de forma violenta que se fueran del lugar.
Ante la presencia de cuatro Mossos d’Esquadra, que no han logrado impedirlo, los violentos han desmantelado la carpa de VOX mientras gritaban «¡Fuera fascistas de nuestras calles!».
El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha denunciado los hechos en Twitter con el siguiente mensaje: «Enfermos de odio, azuzados por los medios y políticos irresponsables o malvados como Iglesias y Torra o tontos útiles como Valls. Estos son los escuadristas del procés y del cordón sanitario contra España».
Enfermos de odio, azuzados por los medios y políticos irresponsables o malvados como Iglesias y Torra o tontos útiles como Valls. Estos son los escuadristas del procés y del cordón sanitario contra España.
(Así han reventado una mesa informativa de VOX en Barcelona) pic.twitter.com/suKNetcdfX
— Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) December 15, 2018
Alentados por el presidente Quim Torra, los independentistas están elevando la tensión en las calles de Cataluña para caldear el ambiente ante el Consejo de Ministros que Pedro Sánchez pretende presidir el día 21 en Barcelona. Para esa fecha, los CDR han anunciado su intención de asaltar el aeropuerto de Barcelona, cortar carreteras y colapsar las calles de la Ciudad Condal.
El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha optado por enviar a varios cientos de antidisturbios a Barcelona, para blindar la celebración del Consejo de Ministros, ante la convicción de que los Mossos controlados por el conseller independentista Miquel Buch no van a mover un dedo para impedir los disturbios.