Carlos Bielsa: el alcalde socialista más votado que ha parado los pies a Ximo Puig y apunta a sucederle
Por primera vez, Ximo Puig no ha logrado lo que se proponía. En el proceso de configuración de las listas al Congreso y al Senado, tras perder el poder autonómico y con ello la lealtad de muchos que le debían sumisión por sus puestos de trabajo, el todavía president de la Generalitat Valenciana se ha encontrado con un dique de contención en la provincia de Valencia que le ha impedido colocar a sus secuaces. Carlos Fernández Bielsa, el alcalde socialista más votado de España y secretario provincial del PSPV, le ha ganado la batalla con el apoyo nada menospreciable de las agrupaciones locales, de Ferraz y de Moncloa. Con el aval de la mayoría de los alcaldes valencianos y de la dirección federal. Con la autoridad y legitimidad que da eso.
Fernández Bielsa, que llegó a la dirección del partido a nivel regional sin el apoyo de Ximo Puig, se ha convertido en el principal activo del partido en la Comunitat Valenciana. “Joven pero con experiencia y sobre todo aire fresco” destaca de él un parlamentario valenciano que revalidó su escaño el 28M. Con los pies en el suelo, evitando erigirse en sucesor antes del batacazo que hizo inevitable pensar en el relevo del president, el alcalde de Mislata renunció a formar parte de las listas a nivel autonómico para dedicarse a su ciudad y, si la aritmética lo permite, tratar de ser presidente de la Diputación de Valencia. Hasta ahora ha ejercido de vicepresidente. Esa sigue siendo su máxima aspiración a día de hoy.
Bielsa decidió no ceder ante las pretensiones de Ximo Puig de modificar las listas a su antojo para visualizar que “han perdido y que no tienen el control”, explican en su entorno. Consiguió unanimidad en el seno de su asamblea provincial, con la terna de nombres que presentó a la dirección autonómica. Con la lista que, en ese paso previo a la remisión de la misma a Ferraz, Puig trató de imponer su criterio durante unas horas. Hasta que la comisión de listas le paró los pies y restauró sin tachaduras la propuesta que había aprobado el equipo provincial. Eso, que en el equipo del secretario general de los socialistas valencianos fue interpretado como “una desautorización” por parte de Pedro Sánchez, hizo entrar “en cólera” al president Puig. Un enfado del que todavía no se ha repuesto a día de hoy y que podría precipitar su salida como líder del PSPV. Algo “que aplaudirían muchos” en su organización, señala otro dirigente crítico con él pero en la órbita del ex ministro José Luis Ábalos que mantiene su cuota de poder.
Descartada la opa de Sánchez para hacerse con el control del PSPV vía la ministra de Ciencia e Innovación Diana Morant, que encabeza la candidatura por Valencia en tanto que miembro del Gobierno, todas las miradas apuntan ya hacía Carlos Fernández Bielsa como sucesor de Ximo Puig. Tanto en la Comunidad Valenciana como en Madrid. Aunque el todavía líder regional tratará de evitarlo postulando para su relevo al número tres de su candidatura a las Cortes y miembro de la dirección federal Arcadi España. Como ya avanzó OKDIARIO el verano pasado Puig decidió colocarlo en los puestos de salida pensando en este momento -aunque nadie pensaba que fuera a ser ahora y así-. El president contaba en cederle la vara de mando a medio mandato. Con un escenario radicalmente opuesto al esperado, y sin fuerza ni casi aliados para imponer su criterio, Ximo Puig va a tener muy complicado tutelar el proceso de renovación del PSPV que, con su caída en las urnas, ya está en marcha.