Un candidato de Podemos que fue con Iglesias en 2015 anima a «exterminar a todo votante de Vox, Cs o PP»

Un miembro de la lista electoral de Podemos al Congreso de los Diputados en 2015 ha hecho un llamamiento en las últimas horas para «exterminar sistemática y totalmente a todo miembro y votante de Vox, Cs o PP si se desata una guerra civil». En un mensaje en Twitter que posteriormente ha borrado, Adolfo Ranero ha amenazado de muerte a millones de españoles votantes del centroderecha.

Este experto en Tecnologías de la información y la comunicación (TIC) concurrió en el puesto 25 de la lista de Podemos en las elecciones generales de aquel año. Compartía papeleta a la Cámara Baja por Madrid con Pablo Iglesias, Carolina Bescansa, Iñigo Errejón o Irene Montero Gil. Un año antes, en 2014, se presentó a las elecciones internas de Podemos al Consejo Ciudadano Estatal, el máximo órgano de dirección del partido.

En un mensaje desafiante, Adolfo Ranero apunta a los votantes de Pablo Casado, Santiago Abascal e Inés Arrimadas: «Si quieren guerra, la tendrán. Ahora, que va a ser sin piedad». Pide que «si se desata una guerra civil» la izquierda debe «exterminar sistemática y totalmente a todo miembro y votante de Vox, Ciudadanos o Partido Popular».

A continuación, señala que la violencia ha comenzado por parte del centroderecha: «Han empezado ellos, esto es simplemente autodefensa legítima», justifica este tuitero en su cuenta pública. El mensaje fue retuiteado por otra cuenta de extrema izquierda y gracias a ello se puede aún consultar en la memoria Caché de Google.

Adolfo Ranero no es precisamente un recién llegado a las redes sociales. Además de experto en tecnología lleva desde el año 2009 en Twitter. A sus espaldas tiene 70.000 tuits publicados que leen sus 2.700 seguidores.

«Despedido fulminante»

Este ex candidato de Podemos denunció que tras conocerse que sería candidato a diputado en las elecciones estatales la empresa donde trabajaba, la consultora multinacional Everis, le echó. «Fui despedido de manera fulminante al enterarse la empresa que iba en las listas de Podemos. Es un hecho que verifica el estado de cosas en el que estamos viviendo ahora mismo, en el que resulta imposible, no ya vivir, sino, simplemente sobrevivir», denunció en su blog personal.

Ranero asegura que tenía un puesto de consultor en ciberseguridad con contrato indefinido. «Los meses previos el jefe me felicita varias veces junto al resto de compañeros por el buen trabajo hecho, por el interés y la profesionalidad. Pero, de repente y misteriosamente, todo cambió de golpe», apuntó.

«El jefe me sacó a la calle, a un aparte, y empezó a echar una bronca que no comprendía, por un asunto sin importancia. Me fui a casa perplejo», explica, para relatar a continuación que unos días después «el director del departamento le plantó en la cara la carta de despido, pero, en el colmo del surrealismo, la carta no argumenta ningún motivo, sólo dice que van a prescindir de sus servicios y que le despiden».

«Alerta antifascista»

En todo caso, este lenguaje bélico lo inició el líder de Podemos, Pablo Iglesias, tras los resultados de Vox en las últimas elecciones andaluzas. En una rueda de prensa lanzó una petición de organizar movilizaciones «antifascista» a todos los trabajadores, estudiantes, feministas y LGTBI y colectivos progresistas del país para frenar a la «extrema derecha» y proteger «la democracia» tras la irrupción de los de Santiago Abascal en el Parlamento andaluz.

En una comparecencia en Madrid con semblante muy serio, junto al coordinador general de IU, Alberto Garzón, reconoció la preocupación que les dejaban los resultados de las elecciones andaluzas en las que han perdido 3 escaños respecto a los 20 que sumaron sus formaciones en 2015. «Alerta antifascista», proclamó Iglesias. «No nos vamos a rendir», agregó, por su parte, el hoy ministro de Consumo.