Gobernado por el bildutarra Asirón

El Ayuntamiento de Pamplona subvenciona un taller de «desprincesamiento» contra el amor romántico

Las mujeres ya no pueden querer ser princesas. Esa es la idea que quiere transmitir el ayuntamiento de Pamplona mediante un taller de ‘Desprincesamiento’.

El Ayuntamiento de Pamplona subvenciona un taller de «desprincesamiento» contra el amor romántico
Montaje-Joseba-Asiron

El alcalde de Pamplona, el bildutarra Joseba Asiron, ha encontrado un buen motivo para gastar el presupuesto público: el ‘desprincesamiento’ de las mujeres. Objetivo que acometerá a través de unos talleres municipales que se celebrarán el 14 y 15 de junio próximos.

«En el siglo XXI las mujeres ya no pasan la vida en una torre, esperando que un príncipe les rescate”, se relata en la página web de participación ciudadana del consistorio navarro.

Según el folleto informativo, «aún existen muchas dinámicas sociales que deben ser revisadas” como, por ejemplo «la imposición de un canon de belleza imposible, la construcción de una idea de amor romántico que reproduce las desigualdades, la visión de la soltería de las mujeres como un estado carencial, la subordinación de sus deseos a los de las otras personas o la falta de reconocimiento de su trabajo en casa y en el mercado”.

De esta manera el taller persigue acabar con el amor romántico como sujeto propio del machismo y limitador de la mujer.

Los contenidos que se tratarán en el curso se dividen en cuatro:

1. El ideal de belleza que se impone a las mujeres, y los intereses ocultos que hay detrás de él, así como las consecuencias personales y sociales de la imposibilidad de alcanzarlo.

2. La construcción sociocultural del amor romántico, que hace entender la complementariedad como excusa para la desigualdad y que genera relaciones que restan autonomía personal y libertad.

3. La división sexista del trabajo, que responsabiliza desde la culpa de las tareas de cuidados, las menos valoradas y peor remuneradas.

4.La relación con el deseo y la sexualidad, y la incapacidad impuesta para reconocer y satisfacer los propios deseos de las mujeres en contraposición con la tendencia a adelantarse a la satisfacción de los deseos ajenos.

El alcalde de Pamplona ha creado una escuela municipal de “Empoderamiento y participación” en la que se incluyen este tipo de tareas. Además de este taller se ha establecido una escuela de feminismos y otras actividades dirigidas, por ejemplo a analizar el papel de la pornografía en las relaciones actuales.

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