La Audiencia Nacional abre una investigación tecnológica sobre las cartas incendiarias
El juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama ha abierto una pieza separada secreta dentro de este procedimiento
La Policía busca en grupos de ultraizquierda a los responsables de las cartas incendiarias
Correos intercepta tres sobres con ojos para la Embajada de Ucrania y los consulados de Barcelona y Málaga
El juez de la Audiencia Nacional que investiga el envío de una serie de cartas incendiarias a distintas instituciones ha acordado abrir una nueva línea de investigación en la causa para llevar a cabo una serie de pesquisas de carácter tecnológico.
El titular del Juzgado Central de Instrucción Número 4, José Luis Calama, ha abierto una pieza separada secreta dentro de este procedimiento, que se inició el pasado mes de noviembre.
Desde entonces, el magistrado indaga en el envío de una serie de misivas que contenían material pirotécnico. Una de ellas fue remitida al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, el pasado 24 de noviembre, después de que los servicios del Departamento de Seguridad de Presidencia del Gobierno, en las tareas de cribado y filtrado de la correspondencia, detectasen un envío postal sospechoso. Se trataba de un sobre dirigido al presidente del Gobierno que había sido remitido por correo postal ordinario.
Ese sobre sería similar por sus características y contenido a los recibidos por la Embajada de Ucrania y la Embajada de Estados Unidos en Madrid, por la empresa Instalaza en Zaragoza, por la Base Aérea de Torrejón y por el Ministerio de Defensa. Así lo aseguran fuentes jurídicas a Europa Press.
Investigación
Como ya adelantamos en este periódico, la Policía Nacional busca en grupos de extrema izquierda a los responsables de las cinco cartas incendiarias –que no explosivas– recibidas entre el pasado miércoles 30 de noviembre y este jueves 1 de diciembre. Según ha podido saber OKDIARIO por fuentes de la investigación, los agentes se centran en «grupúsculos violentos» de ideología antifascista, de extrema izquierda, aunque no descartan ninguna otra vía de investigación posible. El 24 de noviembre Moncloa recibió una carta sospechosa dentro de un paquete dirigido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Otros tres de ellos se recibieron en Madrid, en la Embajada de Ucrania, en el Ministerio de Defensa y en la base aérea de Torrejón de Ardoz. El quinto fue el recibido en la sede de la empresa Instalaza, dedicada a la fabricación de armas, en Zaragoza, y el sexto el detectado en la Embajada de Estados Unidos en Madrid al mediodía del jueves.
La investigación apunta que los sobres presentan unas características similares en la forma, en el material pirotécnico que contenían, comparten una letra parecida en la dirección del destinatario y todos llegaron por vía postal ordinaria y fueron remitidos desde el interior de España. Por tanto, la Policía cree que fueron fabricados y enviados por la misma persona u organización.