Armengol destina un millón de euros para subvencionar el uso del catalán en los medios
El Gobierno balear, en manos de Francina Armengol (PSOE), ha aprobado recientemente sus líneas estratégicas de subvenciones, que conceden un lugar prioritario a la imposición del catalán. A este fin se destina hasta un millón de euros, principalmente en ayudas a medios de comunicación.
Las subvenciones forman parte del Plan Estratégico 2018-2020, aprobado recientemente, y que sirve de soporte a las políticas prioritarias del Ejecutivo de las Islas. La controvertida política lingüística encuentra reflejo en varias partidas significativas, agrupadas en el capítulo ‘Fomento del uso de la lengua catalana’.
Así, se destinarán hasta 300.000 euros en «ayudas para actuaciones de fomento del uso de la lengua catalana en las Illes Balears» con el objetivo de «promover actividades que contribuyan al fomento del uso social de la lengua catalana», 250.000 euros para «fomentar la presencia de la lengua catalana en los medios de comunicación escritos de periodicidad diaria», 200.000 euros para otras «publicaciones en el territorio» de la comunidad, y otros 250.000 para medios de comunicación audiovisuales que emitan en lengua catalana.
El Gobierno balear ya destina más de 3 millones de euros dentro de los Presupuestos autonómicos a «normalizar» el catalán en las islas. Esta partida corresponde exclusivamente al programa para la “planificación y normalización de la lengua catalana”, dentro de la Dirección General de Política Lingüística.
Desde que Armengol llegó al poder en 2015 esta cifra no ha dejado de crecer. En 2016, la asignación para el programa era de 2.828.715 euros. Al año siguiente, ya subió a los 2.934.471. En las cuentas de este año se incrementa en medio millón de euros, destinados, sobre todo a «familias e instituciones sin ánimo de lucro» para la promoción del catalán, empresas privadas que colaboren con la imposición de la lengua o empresas públicas.
La controvertida política lingüística de Baleares ha sido objeto de polémica en los últimos meses, sobre todo, a raíz del decreto para imponer la lengua en la Sanidad.
La misma situación se produce en el ámbito educativo. Como informó OKDIARIO, el nuevo Reglamento de usos lingüísticos de la Universidad de Baleares (UIB) establece el catalán como “lengua propia” con carácter de “lengua oficial” y, como tal, determina que debe tener «un uso prioritario», y «la comunidad universitaria se ha de esforzar por hacerla vehículo preferente de enseñanza».
Esa imposición, según denuncian las plataformas críticas, se produce en el día a día, y de manera solapada. Un ejemplo son los formularios de inscripción en los centros escolares, que debe cumplimentar los padres, y en los que se condiciona la elección a aceptar el proyecto lingüístico del mismo.