Arde Pamplona por los insultos a la Dolorosa: «Me cago en la Virgen que es puta»

El silencio durante el traslado de la Virgen Dolorosa desde la iglesia de San Lorenzo a la Catedral se vio empañado por gritos e insultos a la imagen. «Me cago en la Virgen que es puta» se escuchó en plena noche según una información que adelantó Navarra.com.

La gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los fieles católicos pamplonicas se produjo tras los graves insultos proferidos contra la Dolorosa. El silencio respetuoso con el que avanzaban los acompañantes de la imagen en su tradicional traslado se quebró cuando alguien, según algunos testigos, desde un balcón, profirió el indecente agravio contra la virgen: «Me cago en la Virgen que es puta», dijo la voz que en el vídeo de Navarra.com se puede escuchar perfectamente.

Lejos de responder a la provocación, los fieles continuaron su camino hacia la Catedral, hastiados y con rabia ante el enésimo agravio que sufren desde que la Alcaldía de Pamplona es ocupada por el Joseba Asirón de Bildu.

Primero fue una exposición blasfema de Abel Azcona. La exposición bajo el nombre de Desenterrados se exhibió en la sala de exposiciones de la Plaza de la Libertad, espacio cedido por el alcalde de la formación proetarra. En ella, aparecía la palabra «pederastia» formada con 242 hostias consagradas. El artista explicó en Twitter cómo realizó su performance.

El Ayuntamiento se negó a clausurar la muestra pese a la indignación de los vecinos de Pamplona. El acto fue denunciado y el artista tuvo que pasar por los juzgados para rendir cuentas ante el tribunal tras ser acusado de delitos de profanación y contra los sentimientos religiosos.

En las fiestas de carnaval volvió a producirse un hecho que encendió a todos los católicos de Pamplona. La Virgen Dolorosa fue protagonista de una procesión en la que caricaturizaron la imagen, vistiendo una especie de muñeco, que más parecía una bruja, con ropas similares a las que lucía anoche en su traslado a la Catedral.

El vídeo de la ‘procesión’ caricaturizada se convirtió en viral entre los habitantes de la capital navarra a medida que crecía la indignación entre los creyentes, que han vuelto a ver como anoche se volvió a demostrar una tremenda falta de respeto contra uno de los símbolos religiosos más venerados de la ciudad.