25 guardias civiles viajan a Irak para instruir en la lucha contra el terrorismo
Son 25, pero podrían haber sido 170, porque este es el número de agentes de la unidad de elite de la Guardia Civil, los Grupos de Acción Rápida (GAR), que se ofrecieron voluntarios para viajar este viernes a Irak con una mochila cargada de su experiencia en la lucha antiterrorista.
Les ha despedido esta mañana el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, en la base aérea de Torrejón de Ardoz, desde donde han partido para una estancia de cuatro meses y medio (después serán relevados por otros compañeros) con un objetivo fundamental: formar a la policía federal de Irak en la lucha contra el Estado Islámico (ISIS).
El GAR, emblema del combate a ETA durante la mayor parte de la historia de la banda terrorista doméstica, ya ha compartido su formación y bagaje en países como Afganistán, República Centroafricana, Líbano, Haití, Senegal, Bosnia o Kosovo.
Ahora se desplaza a Irak para sumarse a los 425 militares españoles que ya forman parte de la Coalición Internacional contra el ISIS y que tienen su base, la ‘Gran Capitán’, en Besmayah, a unos 45 kilómetros de Bagdad.
Tenéis nuestro apoyo y admiración por vuestra valentía y compromiso. Cuidaos mucho en Irak y cumplid vuestra misión. @guardiacivil pic.twitter.com/MFWsu2oRJk
— Juan Ignacio Zoido (@zoidoJI) 24 de febrero de 2017
Zoido les ha trasladado el orgullo de los españoles pro al valentía con que afrontan la misión, acordado en Consejo de Ministros en diciembre, de instruir a las fuerzas de seguridad de Irak «enseñándoles lo necesario para hacer frente con éxito a un enemigo feroz y despiadado».
Jesús Gayoso, el teniente coronel jefe de los GAR, explica a la agencia EFE la «muy específica» tarea de su unidad, que llega al territorio iraquí para contribuir a la estabilidad del nuevo estado que se está construyendo. En suma, a su normalización, como pretende la Coalición Internacional.
Un país con tres policías: la federal, la local y la de fronteras. Los miembros del GAR comenzarán con la primera de ellas esa labor de formación de los agentes iraquíes, a los que pretenden «exportar» su experiencia antiterrorista aún a sabiendas de que el de ETA y el del ISIS son terrorismos diferentes, si bien con algunas similitudes que requieren estrategias policiales similares.
No se trata de desvelar esas técnicas que en cursos de un mes de duración el GAR intentará trasladar a los policías iraquíes, pero no se descarta que en esa formación pueda darse un salto cualitativo que permita patrullas conjuntas en las calles.