Telefónica pide una ‘tasa Google’ coordinada a nivel mundial frente a la decisión unilateral de Sánchez

Telefónica ha insistido en pedir una política fiscal nueva y coordinada a nivel europeo y mundial para hacer frente a la ventaja competitiva que tienen actualmente las compañías que prestan un servicio digital global frente a quienes prestan un servicio local, en referencia a los gigantes tecnológicos como Google o Facebook. La propuesta de la operadora española, defendida ya en ocasiones anteriores, está incluida en su plan de Pacto Digital hecho público este jueves.

Mientras, este jueves el Gobierno ha sacado adelante en el Congreso la conocida como ‘tasa Google’ -junto a la ‘tasa Tobin’-. Pedro Sánchez no ha esperado ni a Europa ni al resto de la OCDE, donde se está debatiendo un impuesto similar a nivel global, en medio de las críticas de la oposición por la posible avalancha de demandas de compañías por el concepto de doble imposición -pagar un mismo impuesto dos veces-. Ahora pasan al Senado y se espera que entren en vigor en 2021. El Gobierno espera recaudar 968 millones de euros con este nuevo impuesto, que deberán pagar las empresas que facturen más de tres millones de euros en España, ó 750 millones a nivel global.

Para Telefónica es vital que se ponga en marcha un nuevo sistema fiscal más justo a nivel mundial. «Nuevas políticas fiscales deberían sustituir al actual sistema fiscal internacional que no garantiza que los ingresos derivados de las actividades digitales no queden injustamente fuera del alcance de las leyes fiscales nacionales e internacionales», asegura la operadora en su propuesta. «La OCDE y la UE deberían ofrecer soluciones coordinadas que dejen de asfixiar exclusivamente a los contribuyentes empresariales físicas y vinculados al territorio», añade.

«La digitalización facilita la prestación transfronteriza de servicios digitales, lo que crea ventajas competitivas injustas para los servicios mundiales frente a los locales debido a las políticas y sistemas fiscales obsoletos. Como ya han reconocido el G20 y la OCDE, una cuestión clave para una digitalización más justa es la lucha contra los agresivos esquemas de planificación fiscal que generan un terreno desigual para las empresas», insiste la operadora.

Además, Telefónica pide que se eliminen impuestos al sector, y cita expresamente tasas específicas para las telecos en Brasil. En concreto, uno sobre los servicios móviles que suponen entre el 25% y el 37% sobre los precios de venta al público. En opinión de la operadora, este impuesto resta oportunidades de inversión a las compañías para modernizar y mejorar el servicio.

Fusiones

Otra de las históricas reivindicaciones de la operadora también está incluida en su propuesta de Pacto Digital. Se trata de que los reguladores europeos permitan las fusiones en los países europeos aunque eso suponga reducir de cuatro a tres los operadores nacionales. Hasta ahora, la UE ha vetado este tipo de operaciones o las ha aprobado con fuertes condiciones que en la práctica suponían un veto.

En cambio, en Estados Unidos se ha llevado otra política diferente y, según Telefónica, les ha ido mucho mejor a las empresas y a los usuarios. La operadora cita el ejemplo de la fusión de T-Mobile y Sprint, que ha supuesto el compromiso de T-Mobile de desplegar el 5G al 99% de la población en seis años.

«Las políticas regulatorias y de competencia deben adaptarse rápidamente a los cambios de dinámicas competitivas para evitar inhibir nuevos modelos de negocio y situaciones de desventaja injusta para los agentes de mercado ya regulados», asegura la operadora. Telefónica se refiere a la falta de regulación similar para todos los competidores, en referencia de nuevo a gigantes como Facebook o Google. «Unos mismos servicios deben regirse por las mismas normas, sus prestadores cumplir las mismas obligaciones y sus destinatarios disfrutar de la misma protección», exige.