La SEPI refuerza su control de Indra con el incremento hasta el 8% de la participación de Escribano
De esta forma, se protege de la posible venta del 5,1% del fondo Amber Capital
Escribano Mechanical and Engeneering ha elevado del 3,4% al 8% su participación en la firma tecnológica y de defensa Indra, por un valor aproximado de 118 millones. De esta forma, refuerza el control de la SEPI ante una posible salida del fondo Amber Capital y de cara a la creación del futuro campeón español de defensa.
La empresa de mecanizados y sistemas de defensa se convierte así en el segundo accionista de Indra tras la compra del 3,4% de sus acciones el pasado mayo por unos 68 millones. Adelanta así al citado Amber, que tiene el 5,13%, y a SAPA Placencia, con el 5%. El primero es el holding público de participaciones industriales con el 25,16% del capital.
Escribano califica esta compra de «inversión estratégica» con la que busca incrementar su posición en el sector de la defensa, fomentar el desarrollo de nuevas tecnologías y capacidades y la creación de «empleo cualificado».
Como explicó OKDIARIO en su día, las compras de Escribano pretenden suplir la posible salida de Amber, el fondo de Joseph Oughourlian, al que el Gobierno invitó a entrar en Indra para compensar sus enormes pérdidas en Prisa. Este fondo se ha hartado de esperar la anunciada escisión de la división de tecnología civil, Minsait, que espera que dé un impulso a la cotización de Indra en Bolsa. Y el Gobierno teme que venda su participación en cualquier momento.
Además, como también adelantó este medio, el objetivo del Gobierno -con la bendición del PNV- es crear un gran grupo de defensa español aglutinado en torno a Indra para competir con otros campeones nacionales europeos como Leonardo o Thales. Eso explica la compra del 9,5% de la vasca ITP Aero y la recíproca entrada de SAPA -que forma parte del consorcio que compró ITP a Rolls Royce en 2021- en el accionariado de Indra. Más recientemente, también ha adquirido compañías más pequeñas como Epicom.
Devolución de favores
Dentro de esta estrategia, las compras de Escribano pretenden reforzar el núcleo duro de Indra junto a la SEPI y SAPA. Según fuentes del sector, el grupo industrial estaría devolviendo al Gobierno favores como su entrada en el consorcio que está desarrollando el vehículo blindado de infantería 8×8 Dragón o el megacontrato para fabricar respiradores, sin experiencia previa, durante la pandemia.
Asimismo, las fuentes sostienen que tanto la inversión inicial de 68 millones como la anunciada este viernes de 118 requieren que Escribano se endeude (apalancamiento), ya que su facturación anual ronda los 120 millones. En mayo, la compañía aseguró que acometió la primera compra del 3,4% con su caja y sin necesidad de endeudarse.
Escribano exporta su productos a unos 25 países, prevé cerrar el año con una facturación de 120 millones de euros y en los últimos 3 años ha invertido en torno a 77 millones de euros en empresas españolas.
Actualmente cuenta con una plantilla de alrededor de 750 empleados y el 40% de la misma tiene una edad media de entre 30 y 35 años, al tiempo que la mayoría son ingenieros y perfiles técnicos.