Qué criptomonedas raras nos podemos encontrar
Algunas criptomonedas tienen nombre gracioso, pero son totalmente reales.
Los creadores de las primeras criptomonedas las desarrollaron con la voluntad de que fueran medios de pago reales ampliamente utilizados por la población. Pretendían generar un ecosistema distinto al financiero tradicional, al que criticaban con dureza, especialmente después de la crisis desatada por la caída del gigante Lethman Brothers. Esta apreciación no ha sido compartida por todo el mundo. O, al menos, el hecho que las criptomonedas son la solución. Así pues, como consecuencia de ello, se han generado criptoactivos que, más que buscar un crecimiento real, se han puesto al mercado como una crítica a estas monedas digitales o como un juego. A continuación, exponemos algunas de las más curiosas:
• Putincoin; unos fans del presidente ruso han tirado adelante una criptomoneda con el nombre del dirigente. Lo consideran la persona más influyente del mundo y entienden la creación de este criptoactivo como un homenaje a su persona. Su valor es muy bajo (ronda por los 0,0002 dólares) y tiene un volumen de capitalización también pequeño, apenas superior a los 150.000 dólares.
• Trumpcoin: Putin no es el único Presidente de la actualidad que cuenta con un “club de fans” movilizados amantes de las criptomonedas. En su caso, este critpoactivo se lanzó con la finalidad de conseguir fondos para su campaña electoral. En la actualidad, su valor también es bajo, alrededor de los 0,02 dólares, con una capitalización de mercado poco por encima de los 170.000 dólares.
• Trollcoin: como bien indica su nombre, está dirigida a aquellas personas a quienes les gusta realizar bromas, pero, como comentan en su propia página de presentación, de una forma alegre y respetuosa, no maliciosa. Se mueve por los 0,0004 dólares y su capitalización de mercado supera los 240.000 dólares.
• Herbalist Token: el objetivo de esta criptomoneda es fomentar el comercio de las llamadas “hierbas raras”, como por ejemplo las plantas carnívoras y acuáticas o los baobabs. Su valor es extremadamente reducido, de unos 0,000007 dólares. Su capitalización no llega apenas a los 70.000 dólares. No se puede decir, por lo tanto, que haya conseguido su objetivo.
• Potcoin: es una criptomoneda centrada en el fomento del comercio de la marihuana. Sus creadores esperaban que fuera el medio de pago usado para realizar cualquier operación de compraventa de esta hierba. Su valor rodea los 0,007 dólares y goza de una capitalización de mercado superior a las anteriores, por encima del millón y medio de dólares. Aun así, comparada con las principales criptomonedas, continúa en una posición muy relegada.
• Jesus Coin: sus creadores aseguran que, gracias a esta criptomoneda, Jesús “vuelve” y que, mediante su uso, es posible salvarse del “infierno”. Su tono paródico, pero, no le ha ayudado a despegar. Cuenta con un valor de 0,00001 puntos y una capitalización de mercado alrededor de los 250.000 dólares.
• Evil Coin: para compensar la anterior, también existe la criptomoneda del “demonio”, destinada a aquellas personas a quienes les apetece hacer el “mal”. Tiene un valor de unos 0,003 puntos y una reducida capitalización que apenas supera los 65.000 dólares.