El Gobierno se olvida de los feriantes: sin ayudas de autónomos y excluidos del plan de desescalada
Sin Feria de Abril, sin Fallas, sin San Isidro y sin Sanfermines. El coronavirus ha obligado a aplazar o cancelar las fiestas más populares del país, y a buen seguro, ocurra lo mismo con los festejos de otras ciudades, pueblos y barrios. Esto lleva al límite a cerca de 30.000 familias de feriantes que ni siquiera han podido comenzar la temporada. Su situación es especialmente delicada, ya que la mayoría no tiene acceso a ayudas o subvenciones y no está previsto que retomen la actividad durante el plan de desescalada.
«Se están anunciando medidas de desescalada para muchos sectores, pero no para el nuestro. Es más, incluso cuando termine el estado de alarma tampoco podremos trabajar porque todo se está cancelando. El impacto de esta crisis va a ser brutal para nosotros. Podríamos estar hasta un año y medio sin trabajar», explica Fernando Piqueras, presidente de la Asociación Cultural Unión de Feriantes de la Comunidad de Madrid (ACUFCAM) a OKDIARIO.
No tienen actividad y además, arrastran una pesada mochila de gastos: han abonado los seguros de las atracciones, las revisiones técnicas y han adelantado a los ayuntamientos las tasas de ocupación de terrenos. Sólo para la Feria de Abril de Sevilla desembolsaron 2,3 millones de euros en concepto de tasas, un dinero que el Ayuntamiento se comprometió a devolver íntegramente tras cancelar el evento.
Al tratarse de una actividad temporal -se concentra entra abril y octubre- la mayoría de los feriantes no paga la cuota de autónomos durante todo el año. Es más, el 70% de los feriantes no estaban dados de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) el 14 de marzo cuando se decretó el estado de alarma, por lo que sólo el 30% restante ha podido pedir las ayudas.
Ante esta situación, la Federación ATA ha solicitado a los grupos parlamentarios del Congreso que se extienda la prestación por cese de actividad a los trabajadores por cuenta propia que «desarrollen actividades de temporada» y que no estuvieran dados de alta el en el RETA cuando se declaró el estado de alarma. La Federación reclama el acceso a las ayudas a todos aquellos que acrediten haber estado de alta «al menos 120 días dentro del periodo comprendido entre el 1 de abril y el 1 de octubre, ambos incluidos, en los dos últimos años».
Los feriantes explican a este diario que, de momento, no se han reunido con ninguna administración, pero piden sentarse a hablar con los técnicos del Gobierno «cuando sea necesario» para elaborar un plan de vuelta a la actividad. Entre otras cosas, quieren tener acceso a créditos ICO con 12 meses de carencia desde el inicio de la actividad, que se supriman las tasas municipales por ocupación de vía pública y algún otro tipo de apoyo económico que les permita llegar a la temporada de 2021.
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