El Gobierno se arrodilla ante Argelia con el gas un 400% más caro y la amenaza de cortar el gasoducto
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Algares, ha viajado este jueves hasta Argelia para tratar de evitar que el Gobierno argelino no cumpla su amenaza de cortar el suministro de gas a España el próximo mes. Argelia, que suministra el 45% del gas que se consume en España, ha advertido de que cerrará uno de los dos gasoductos que suministran a España, el que discurre en parte por Marruecos. Quedaría activo el de Medgaz.
El conflicto se produce en medio de una crisis mundial del gas, que ha disparado su precio en las últimas semanas por el alza del consumo de los países asiáticos y las masivas compras de países europeos para almacenarlo de cara a afrontar el frío invierno.
Según el Gobierno, Albares mantendrá una reunión con su homólogo en el país, Ramtane Lamamra -a quien ya vio la semana pasada en los márgenes de la Asamblea General de la ONU-, para tratar de evitar que cumpla su amenaza y no corte el suministro de gas a España.
El Gobierno tiene intención de reforzar la relación energética con Argelia, han precisado desde el Ministerio, por lo que ha ido acompañado de directivos de Naturgy.
Argelia es el principal país proveedor de gas natural para España, buena parte del cual era transportado hasta ahora vía Marruecos, a través del gasoducto Magreb-Europa. Sin embargo, a raíz de la ruptura de relaciones entre los dos países vecinos anunciada por Argel el pasado 24 de agosto, el Gobierno argelino desveló que ahora el suministro se haría a través del gasoducto Medgaz, que une al país norteafricano con España.
¿Suministro garantizado?
Albares aseguró en sede parlamentaria que el suministro de gas estaba garantizado, tras los contactos mantenidos tanto con las autoridades argelinas como marroquíes. «El suministro de gas a España no está en peligro porque nuestros amigos marroquís y argelinos quieren trabajar conjuntamente en este terreno», aseveró rotundo en el Congreso, insistiendo en que «nadie tiene que preocuparse» por este asunto en España, en pleno debate sobre el elevado precio de la luz. La realidad es que España depende del gas argelino.
Naturgy y la argelina Sonatrach acordaron en julio la entrada en funcionamiento de la ampliación de Medgaz en el cuarto trimestre de este año. Con una inversión de 90 millones de dólares (73 millones de euros), la entrada en funcionamiento de la ampliación de Medgaz vehiculará un 25% del gas natural que se consuma en España y fortalecerá la relación estratégica entre ambas compañías.
En la actualidad, el gasoducto Medgaz es propiedad de la argelina Sonatrach (con una participación del 51%) y Naturgy (con el 49% restante, a través de una sociedad de propósito especial en la que participa BlackRock) y existe un acuerdo de accionistas que les otorga el control conjunto del gasoducto.
El 49% del suministro
En cuanto al Gasoducto Magreb-Europa, que canaliza el gas argelino a través de Marruecos, entró en funcionamiento en noviembre de 1996, por lo que este año se cumplen 25 años de la inauguración de esta obra, que se ha convertido en una de las principales puertas de entrada del gas en España.
Argelia suministra a España a través de estos dos gasoductos aproximadamente el 45% del gas que consume el país. El resto se importa a través de buques metaneros y se regasifica en las plantas regasificadoras que hay en distintos puntos de la costa española.
España cuenta con seis puntos de conexión internacional para el suministro de gas: dos con Argelia, por Tarifa (Cádiz) y Almería (con los gasoductos del Magreb y Medgaz respectivamente); dos con Portugal, a través de Badajoz y Tuy (Pontevedra); y otros dos con Francia, por Irún (Guipúzcoa) y Larrau.