Frenazo de la venta de coches por las elecciones del 23J a la espera de ayudas al diésel y la gasolina

En un contexto económico de total incertidumbre provocado por el aumento de los precios en el mercado, los españoles no quieren desaprovechar ninguna ayuda del Estado y menos a la hora de acudir a un concesionario para adquirir un coche nuevo, ya que se trata de la segunda compra más importante en la vida de un consumidor. Ante esta situación, el sector está registrando una caída de las matriculaciones de lo que va de mes por los efectos derivados del adelanto de las elecciones generales del 23J, ante la posibilidad de que con un cambio de gobierno se vuelvan a activar los incentivos a la compra de coches propulsados por diésel y gasolina.

Así lo han señalado fuentes cercanas al sector, en conversaciones con este diario, que han confirmado que «en lo que va de mes estamos registrando una caída de las visitas a las exposiciones de vehículos -concesionarios- importante por el efecto del inicio de las vacaciones, pero también por el impacto negativo en las matriculaciones de coches nuevos del adelanto de las elecciones generales».

«Una caída del tráfico que se debe a que el cliente espera a realizar una compra tan importante en su vida ante la posibilidad de cambios regulatorios o la puesta en marcha de nuevas subvenciones a nivel nacional», añaden las citadas fuentes. Una situación que ya se repitió en los comicios autonómicos y municipales del pasado mes de mayo, pero que en esta nueva convocatoria se acentúa.

Ayudas a los coches eléctricos

La última medida que se ha puesto en marcha ha sido la puesta en marcha de una nueva deducción en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) del 15% tanto para la compra de un vehículo eléctrico como para la instalación de sistemas de recarga, con una base máxima de 20.000 euros. A la que también se pueden sumar los incentivos a la compra de coches eléctricos del plan Moves III.

Subvenciones que ha puesto en marcha el Gobierno de Pedro Sánchez, pero que sólo incluyen a los vehículos propulsados por motores de cero emisiones y que excluye a los de combustión, a pesar de que ocupan el 95% de la cuota de mercado en España.

Ayudas a los coches de combustión

No obstante, en la oposición, el Partido Popular, liderado por Alberto Núñez Feijóo, propuso incluir en los incentivos a los vehículos diésel y gasolina dentro de las ayudas, como ya hizo el Ejecutivo socialista en 2020 con el plan Renove que se canceló por presiones del Ministerio de Transición Ecológica -cartera de Teresa Ribera-, tal y como avanzó este diario.

Lo cierto es que lo que quieren hacer los populares tiene lógica, ya que con estas ayudas, aunque no se fomentaría el uso del vehículo eléctrico, sí que se reduciría la edad del parque móvil que ya supera los 14 años y con ello se reducirían las emisiones de CO2. Sin embargo, el equipo de Feijóo aún no ha confirmado la adopción de esta medida si llegan al Palacio de la Moncloa.