Éstos son los tres ex franquiciados que participaron en la rueda de prensa contra Restalia

Días después de haberse archivado la denuncia contra Restalia por supuesta estafa, el pequeño grupo de franquiciados que formaron parte de la demanda se enfrenta a un horizonte judicial preocupante. No sólo tendrán que afrontar nuevas cuantías para que puedan recurrir la sentencia, sino que se enfrentan a una posible demanda de Restalia por los perjuicios ocasionados, según manifestó la propia compañía en un comunicado, que puede consistir en acusarles de varios presuntos delitos como el de denuncia falsa, infracción de derecho al honor, intimidad y propia imagen, o acciones de competencia desleal, pues los denunciantes tienen intereses en cadenas de la competencia. Tampoco se descartaría denuncias por vulneración del código deontológico de los abogados por fallar a la presunción de inocencia con claro objetivo de negocio y la búsqueda de clientes.

Tres son los franquiciados que han encabezado la denuncia, quienes pusieron su voz y su rostro a esta causa, llegando a participar, incluso, en la rueda de prensa contra Restalia, organizada por Rafael Franco y el bufete Cremades & Calvo-Sotelo.

Enrique Cebeira

Enrique Cebeira fue ex secretario de la Junta Directiva de la Asociación Española de Franquiciados de Restalia, inscrita en el Registro Nacional de Asociaciones del Ministerio del Interior. Tiene un entramado empresarial considerable, con cargos de administrador único, solidario y mancomunado en hasta 14 sociedades diferentes dedicadas a la explotación agrícola y ganadera, hostelería y restauración, construcción de edificios residenciales o productos para farmacéuticos. Estamos, por tanto, ante un empresario con conocimientos mercantiles y empresariales, por lo que, tal y como reflejó el juez en su auto de archivo, se les presupone “capacidad para entender el negocio que se les propone y las grandes cifras que comporta”.

En el año 2021, por ejemplo, realizó cambios en la administración organizativa de algunas sociedades para proteger a una empresa con cerca de medio millón de euros de capital social. Otras mercantiles, como es el caso de Enamelhec SL, se encuentran en situación concursal, caso que lleva el juzgado número 16 de Madrid. Cebeira, según él mismo relató, llegó a tener hasta 7 establecimientos de 100 Montaditos y TGB, adquiridos en diferentes años desde el 2014 y en distintos emplazamientos a lo largo de ocho años de relación con Restalia, periodo en el que se puede comprobar la viabilidad de un negocio. «Si durante este tiempo siguió abriendo locales con la misma cadena, se puede percibir que los resultados eran los que esperaba», afirman fuentes conocedoras del caso.

Cebeira relató en la rueda de prensa la mala experiencia que había tenido con el modelo de franquicia. «Nos vamos a una franquicia porque creemos que hay unos estudios y luego no se cumple ninguno de los ratios», afirmó. Pero ni Restalia ha sido su primera experiencia, ni es la última. Antes de su historia con 100 Montaditos o TGB, Cebeira poseía franquicias de otras cadenas de restauración. «Esto puede dejar entrever que el objetivo de la denuncia fallida podría ser descargar toda la responsabilidad de su fracaso en Restalia, y no en su gestión”, afirman las mismas fuentes.

Cebeira tiene también una franquicia de la cadena Ginos con cuatro socios (Francisco Javier Aguado, Zheng Yu Zhi, Juan Francisco Marcos Morata y Sergio José Hermosa), con quien gestiona hasta cinco sociedades diferentes. Es con ellos con quien ha abierto también, según se puede ver en Linkedin, más locales de otra franquicia, Burro Canaglia, concretamente en Santander, bajo la sociedad Pícaro SL. Se trata de una marca perteneciente al grupo de restauración ClandestineHub.

También ha abierto varias franquicias de otra cadena, Sibuya Urban Sushi Bar, concretamente un local en Oviedo (abierto en septiembre de 2021, justo después de interponer la denuncia contra Restalia), Las Rozas (noviembre de 2021) y Toledo (septiembre de 2022), según publican diversos medios de comunicación sectoriales. Sus socios (administradores mancomunados) en Asian Food Capital, sociedad bajo la que la que está abriendo estos locales de Sibuya Urban Sushi Bar, son los propios fundadores del Grupo Sibuya, compañía que gestiona dos marcas de restauración de la mencionada Urban Sushi Bar y Kamado Asian Food. Se trata de los empresarios Rubén Fernández Lavandera y Eliakin Fuentes Fernández.

María Amparo Álvarez es otra de sus principales socias con la que gestiona varias mercantiles relacionadas con la hostelería. Ahora, regenta una farmacia llamada Lili Álvarez, 28, ubicada en Valdemoro, ubicación que también es el domicilio social de varias de sus sociedades. Entre ellas está Brownie Capital, S.L., la sociedad de la que Enrique Ceberia fue administrador hasta 2021 y que actualmente está administrada por Álvarez. «Estamos, por tanto, ante un empresario independiente, plenamente conocedor de la operativa del negocio de franquicia, así como de sus riesgos, y con evidentes intereses contrapuestos con Restalia», afirman las mismas fuentes.

Julián García

Julián García también fue una de las voces de la rueda de prensa que ofrecieron para contar su versión del caso a los medios de comunicación. Apareció también en el programa Todo es Mentira donde, con claros tintes sensacionalistas, llegó a decir, «que llegaba a temer por su vida por contar su experiencia».

La relación de Julián con Restalia comenzó con la apertura de su local TGB en Irún poco antes de la pandemia, establecimiento que estuvo abierto pocos meses y que luego ocupó con un nuevo negocio de restauración llamado Uralde. Precisamente, esta cuestión también la refleja el juez en el auto de archivo contra Restalia: «Como el perito menciona en su informe, en los casos concretos de los denunciantes todos ellos se vieron afectados al poco de iniciarse la actividad de franquicia por la epidemia del Covid 19, hecho este que por sí solo es apto como para echar por tierra las expectativas más precisas y conservadoras de negocio, pues particularmente en el ámbito de la restauración, la epidemia supuso una merma radical en sus facturación».

García abre el negocio Uralde aprovechando el mismo local, instalaciones e infraestructuras del local de TGB, pero bajo la nueva mercantil Gazapérez S.L. junto a sus socios Luis Julián García Pérez y Aitori Zabaleta Gogorza, los mismos con los que tenía la sociedad Joan and Yul S.L con la que operaban el local TGB. El inicio de García en la hostelería data de 2006, cuando abrió el restaurante Kaialde cuya actividad finalizó también en 2011 al declararse insolvente. Julián García, aunque autónomo, participa como administrador solidario en 3 empresas con la forma jurídica de sociedades

José Antonio Lombardía

El tercer ex franquiciado de Restalia que habló ante los medios es José Antonio Lombardía. Lombardía regentaba un local de la marca Panther, también abierto previo a la pandemia, en 2019, y cerrado recientemente. Antes de abrir el local Panther, fue ‘chief consumer officer’ (CCO) en DIA, donde también fue administrador mancomunado en varias sociedades de dicha empresa como miembro del consejo de administración. DIA es una empresa que opera también el mundo de la franquicia, y que también ha tenido que enfrentarse a procesos judiciales de ex franquiciados similares a los que se pretendió frente a Restalia, los cuales tuvieron el mismo resultado de archivo.