España tendrá 10.328 millones menos de renta y 6.200 millones más de déficit de lo prometido por Sánchez

Bruselas ha avisado este lunes a España de que, con la política económica en la que sigue embarcado el Gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez, nuestro país crecerá considerablemente menos de lo que anuncia el Ejecutivo y los números rojos de las arcas públicas aumentarán muy por encima de lo que promete. Así, en cifras absolutas, en el bienio 2023-2024, la renta de España en términos de PIB será 10.328 millones de euros inferior a la calculada por el Gobierno. Mientras que el déficit será 6.222 millones mayor, lo que supondrá dar una vuelta de tuerca más a la escalada de la deuda pública, que en 2024 se acercará peligrosamente al billón y medio de euros.

Así se desprende del diferencial entre las variaciones de PIB  y de déficit público previstas por el Gobierno de Sánchez y las que calcula la Comisión Europea en sus previsiones económicas publicadas este lunes, tras escrutar las cuentas públicas y privadas de España. OKDIARIO ha traducido a cifras absolutas las previsiones porcentuales apuntadas tanto por el Ejecutivo como por Bruselas.

Para este año, el Gobierno le ha dicho a Bruselas que el PIB, la riqueza generada por nuestro país, alcanzaría los 1,298 billones de euros. La Comisión Europea, sin embargo, dice que será de 1,295 billones; es decir, 3.000 millones de euros menos.

Por su parte, frente a un déficit estimado por el Gobierno de 50.624 millones de euros para el actual ejercicio, Bruselas estima que ascenderá a 53.115 millones de euros. Es decir, un agujero en las cuentas públicas de España de 3.000 millones más que el calculado por Sánchez.

Previsión para 2024

Para 2024, si se mantuviera la senda económica del actual Gobierno socialcomunista, Bruselas advierte que la renta de España rondará los 1,321 billones de euros, 8.000 millones menos de lo que anuncia el Ejecutivo de Sánchez.

Mientras que el déficit público de nuestro país, según la Comisión Europea ascenderá a 43.606 millones, casi 4.000 millones más de la previsión que le había comunicado el Gobierno al Ejecutivo comunitario a finales de abril.

Con esa evolución del PIB y del déficit, y aún respetando la previsión de porcentaje de deuda que maneja el Gobierno –difícilmente sostenible a la vista de la cadena de desmentidos de Bruselas–, el endeudamiento público de nuestro país se elevaría a finales de 2024 a un mínimo de 1,45 billones de euros. Es decir, se acercará peligrosamente a la crítica barrera del billón y medio de euros de deuda.

Herencia envenenada

Aunque habrá elecciones generales a finales de este año, y aún en el supuesto de que el PSOE fuera apartado de La Moncloa por un nuevo gabinete de centro-derecha, la capacidad de reacción del futuro Ejecutivo será limitada en 2024. Dicho de otra forma, su margen de maniobra estará lastrado por el efecto de las políticas económicas y decisiones impulsadas por el Ejecutivo de Sánchez, así como por sus propias cuentas presupuestarias.

La mera prórroga de las cuentas de 2023 atarían en gran parte las manos del nuevo Gobierno, que se enfrentaría al reto de tener que diseñar, negociar, aprobar y aplicar unos nuevos presupuestos del Estado. Y, con elecciones generales en diciembre, en el mejor de los casos esto difícilmente podría ocurrir hasta transcurrido gran parte de 2024.