España deja de ser un país de bares: el 40% habrá cerrado a final de año si no hay ayudas directas

La crisis del coronavirus ha golpeado de lleno al sector de la hostelería. Tanto, que puede decirse que España dejará de ser un país de bares y restaurantes. Mientras los hosteleros han asistido atónitos a las medidas restrictivas impuestas por los distintos gobiernos para controlar el avance de la pandemia, miles de negocios han bajado su persiana de forma definitiva en 2020. No obstante, avisan que esta sangría de cierres continuará este año e incluso se intensificará por la falta de ayudas directas del Gobierno de Pedro Sánchez.

A falta de las ayudas del Ejecutivo, cerrará más de un 20% de los bares y restaurantes en 2021, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Unos datos que se traducen en la pérdidas de más del 40% de bares y restaurantes en tan sólo dos años. Cuarenta de cada cien bares, se dice pronto.

«De las empresas de restauración que comenzaron el año 2020, estimamos que se ha producido un cierre aproximado del 20% de los negocios, con tendencia a subir exponencialmente si el Gobierno de Pedro Sánchez no adopta soluciones rápidas en forma de ayudas directas en 2021», explican fuentes conocedoras de la situación, que tachan de «meras propinas» las medidas económicas de apoyo a un sector vital para la economía española.

Ante este escenario, piden «exenciones fiscales, eliminación del pago de cuotas a las seguridad social, prolongación de los expedientes de regulación de empleo (ERTE) hasta que termine la pandemia, ayudas directas para los gastos fijos de los negocios y liberación del pago de los alquileres a los locales que han cesado al 100% su actividad por las restricciones», para que el Ejecutivo de coalición entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias cumpla la promesa que ha repetido miles de veces des que la crisis del coronavirus comenzó a dar sus primeros coletazos en el mes de marzo: «No vamos a dejar a nadie atrás».

El cierre de 40 de cada 100 bares

A falta de las ayudas del Ejecutivo -que no parece por la labor de lanzar un salvavidas al sector de la hostelería y pasa la pelota a las comunidades autónomas-, cerrará más de un 20% de los bares y restaurantes en 2021, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Unos datos que se traducen en la pérdidas de más del 40% de bares y restaurantes en tan sólo dos años. Cuarenta de cada cien bares, se dice pronto.

Los datos que la pandemia ha provocado el cierre de 65.000 negocios hosteleros y la pérdida de 350.000 puestos de trabajo. Unos datos que podrían empeorar si las ayudas directas encargadas a las comunidades autónomas no llegan con carácter urgente.

Por su parte, han advertido al Gobierno de Pedro Sánchez de que las persianas que vemos hoy bajadas por las medidas restrictivas para frenar el alza de los contagios podrían ser cierres definitivos: «Dan al botón de apagar y la hostelería se cierra, pero no son consciente de que cuando le demos al botón de encender, estos negocios, tardarán tiempo en recuperarse», explican.

Los datos que la pandemia ha provocado el cierre de 65.000 negocios hosteleros y la pérdida de 350.000 puestos de trabajo. Unos datos que podrían empeorar si las ayudas directas encargadas a las comunidades autónomas no llegan con carácter urgente. En concreto, este escenario se saldaría con el cierre de un tercio de los establecimientos hosteleros, hasta 100.000, y la pérdida de hasta 1,1 millones de puestos de trabajo.

Las ayudas ‘fake’ de Sánchez

El ‘Plan de Refuerzo a la Hostelería, el Turismo y el Comercio’, que ha puesto en marcha el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo el pasado 23 de diciembre, no cumple con las peticiones que lleva realizando el sector desde que la crisis del coronavirus comenzó a dar sus primeros coletazos en el mes de marzo, ya que a pesar de estar dotado con 4.220 millones de euros sólo beneficiará a un 3% de los negocios golpeados por la pandemia.

«La dejación de funciones del Gobierno de Pedro Sánchez, refugiándose en las decisiones de las diversas comunidades autónomas, para atajar el problema de la hostelería».

Reducir directamente los costes de los alquileres, facilitar la liquidez de las empresas para que puedan hacer frente a compromisos con proveedores y trabajadores, rebajar los costes fiscales y ampliar los sectores que podrán beneficiarse de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) catalogados como ultraprotegidos. Estas son las cinco bases en las que se sustenta el plan de rescate para la hostelería y alertan de «la dejación de funciones del Gobierno de Pedro Sánchez, refugiándose en las decisiones de las diversas comunidades autónomas, para atajar el problema de la hostelería».

Ante esta situación, piden al Ejecutivo «un cambio de actitud en la decisión de negar un plan de rescate que ayude a aliviar la situación que viven miles de negocios en España».

«No queremos pasar por alto nuestra preocupación por la crisis sanitaria y su aumento en el número de contagios, solicitando, una vez más, responsabilidad a la ciudadanía y un comportamiento adecuado, cumpliendo los requisitos ordenados por las autoridades sanitarias, con el fin de detener este virus que tantos problemas está generando a nivel político, laboral, económico y social», concluyen.