Dimas Gimeno rechaza ser uno de los ‘caballeros blancos’ que entre en DIA para frenar a Fridman
Dimas Gimeno, ex presidente de El Corte Inglés, ha rechazado entrar en el capital de DIA y convertirse en uno de los caballeros blancos que presenten una OPA o un plan alternativo al del ruso Mikhail Fridman, primer accionista de la empresa con un 29% del capital, y al presentado por el propio Consejo. Gimeno ha sido tentado por un grupo de minoritarios de la firma, que se oponen a los dos planes de rescate que hay encima de la mesa y que deben votar los accionistas en la Junta del próximo 20 de marzo.
De acuerdo con las fuentes consultadas, el ex presidente de la mayor empresa de distribución de España ha estado analizando la operación durante semanas hasta que finalmente ha declinado participar en una operación alternativa a la de Fridman.
Gimeno, que se haya inmerso en la búsqueda de su siguiente paso en el sector del retail, ya fue uno de los candidatos a presidir DIA antes del nombramiento de Borja de la Cierva como consejero delegado, proceso que ha finalizado con la entrada en el Consejo del ex secretario de Estado de Comercio Jaime Legaz.
Un grupo de accionistas de la firma, familias empresariales del país que se han quedado atrapadas en la compañía por su brusca caída en Bolsa sobre todo tras el verano, está tanteando a diferentes inversores españoles e instituciones internacionales para recabar apoyos para presentar un plan alternativo para que DIA no acabe en manos de Fridman.
El millonario ruso es el principal accionista de la empresa con el 29% del capital y ha planteado una OPA voluntaria a 0,67 euros por título más una ampliación de capital posterior de 500 millones de euros. Esta plan se debe votar en la Junta de Accionistas del día 20 de marzo en Madrid, junto con la hoja de ruta planteada por el Consejo -ampliación de 600 millones cubierta por Morgan Stanley-.
Las dos partes están enfrentadas de cara al público pero en privado mantienen contactos para intentar alcanzar un acuerdo que evita la disolución de la compañía -está en situación de quiebra patrimonial- o su entrada en concurso de acreedores. De hecho, como publicó este diario, las partes quieren un acuerdo antes de la Junta aunque todos quieren mandar.
Alternativa
Consejo y Fridman están condenados a entenderse pero la solución -que podría llegar in extremis, a horas de la Junta- no es fácil. Mientras, para el grupo de accionistas que está tratando de armar una operación alternativa se le agota el tiempo. Quedan menos de diez días y los inversores ‘tocados’ no se animan a plantear batalla. Dimas Gimeno, entre ellos.
En lo que coinciden todos es en que la empresa tiene activos suficientes para no temer por la disolución. La venta de Clarel y Maxi Dia avanza y hay millones de euros en activos inmobiliarios que podrían venderse, como tiendas y almacenes logísticos, que han despertado el interés del sector.