Caixabank y Sabadell arrancan sus nuevas estructuras en un viernes histórico para ambos bancos

Viernes histórico para dos de las principales entidades bancarias de España, la nueva Caixabank ya con Bankia en sus entrañas, y el Banco Sabadell que ha celebrado su junta de accionistas con la presentación del nuevo consejero delegado del grupo, César González-Bueno, que ha presentado su equipo directivo.

La jornada ha empezado con una presentación a primera hora de la mañana desde la sede social de Caixabank en Valencia donde José Ignacio Goirigolzarri y Gonzalo Gortázar, que serán el presidente no ejecutivo y el CEO del nuevo banco, han desgranado los puntos clave de esta absorción que terminará con la existencia de Bankia para integrarla en Caixabank en un proceso que todavía se extenderá hasta principios del año que viene, ya que por el momento las oficinas seguirán con sus rótulos y los productos, aunque tenderán a converger, seguirán diferenciados a pesar de que Bankia deja este viernes de cotizar en el Ibex 35.

Por lo demás, después de Semana Santa los primeros movimientos de Gortázar irán encaminados a presentar un ERE para su plantilla y comenzar a negociar con el objetivo de cerrar el acuerdo con los sindicatos en junio. En este proceso, los factores determinantes serán la voluntariedad y la meritocracia, pero no la edad, según ha adelantado el consejero delegado de la entidad catalana.

«Queremos hacer algo no traumático y donde prime la voluntariedad. El otro criterio es la meritocracia. No habrá un criterio específico para las personas de 54 o 55 años, no hay un mensaje específico para edades específicas», ha dicho Gonzalo Gortázar, que ha dejado claro que la edad no será un criterio para las salidas en la entidad catalana.

Movimiento en Alicante

Prácticamente tres horas después de la celebración de la rueda de prensa de Goirigolzarri y Gortázar, a 168 kilómetros por la A-7 (autovía del Mediterráneo), se celebraba en Alicante una junta de accionistas clave para el banco más importante con sede en la ciudad, heredero de parte del negocio de la malograda Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM). Banco Sabadell certificaba en su junta de accionistas la marcha de Jaime Guardiola tras una década en la dirección de la entidad catalana y su sustitución por César González-Bueno, quien dirigió nada menos que la potente división ibérica de ING durante años. 

En esta reunión con sus accionistas, González-Bueno ha desvelado algunas líneas clave de cómo será su nuevo equipo directivo, la estructura con la que Sabadell quiere continuar como banco en solitario una vez que se echó atrás su absorción por BBVA debido a los precios de derribo que quería pagar por ellos Carlos Torres, presidente de la entidad vasca. Josep Oliu, quien fue el encargado de decirle ‘no’ a Torres durante aquellas negociaciones por considerar que perjudicaban a sus accionistas, ha señalado que Sabadell tiene «un amplio recorrido de gestión para mejorar sus resultados y su cotización», sin tener que acometer operaciones de consolidación.

Tal y como informaba OKDIARIO hace escasos días, Banco Sabadell en sus conversaciones con el Banco Central Europeo (BCE) no está descartando una fusión y de hecho tiene intención de que pueda incluso ser con un banco europeo. La propia ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ya avisó a finales de 2020 de que el Gobierno trabajaría en 2021 para reforzare «la unión bancaria», un objetivo que puede conseguirse con fusiones transfronterizas, que complacerían al Banco Central Europeo. No hay que olvidar que precisamente el BCE es actualmente el responsable del mayor rescate del Reino de España gracias a las compras masivas de deuda pública española que la institución de Christine Lagarde lleva ejecutando desde que empezó la pandemia: 150.000 millones de euros en 12 meses.

Para completar un viernes de abuso informativo con los bancos, Banco Santander ha celebrado este viernes también su  junta de accionistas. Comparado con las otras dos entidades, el evento público del banco de Ana Botín ha podido considerarse una balsa de aceite donde una de las mayores novedades ha sido el anuncio de la compra de una participación superior al 8% de la división de México, como informaba la entidad esta mañana a la CNMV.