Crisis energética

Aagesen reconoce que el sistema era inestable pero elabora un relato para evitar pagar indemnizaciones

Aagesen, apagón, indemnizaciones
Sara Aagesen.
Eduardo Segovia
  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

La ministra de Transición Ecológica, Sara Aagesen, descargó este martes la principal responsabilidad del apagón en las eléctricas, pero no pudo dejar de reconocer que el sistema era inestable a una perturbación. Ahora bien, se aferró al relato que salva la cara a Red Eléctrica (REE) para no tener que pagar indemnizaciones: que fue un evento multicausal.

En su comparecencia posterior al Consejo de Ministros de ayer, Aagesen no tuvo más remedio que reconocer que falló una de las centrales térmicas que estaban previstas el día anterior al apagón (se declaró indisponible) y que REE no la sustituyó por otra, lo que dejó al sistema en situación muy vulnerable.

Ni siquiera tuvo encendida alguna central sin generar electricidad por seguridad. Así,  cuando quiso poner una en marcha, era demasiado tarde porque no habría podido arrancar hasta las 14 horas: las centrales de ciclo combinado (que generan electricidad quemando gas) necesitan unas dos horas para ponerse en marcha.

En ese sentido, la ministra acusó a las eléctricas de que no absorbieron las perturbaciones pese a cobrar para hacerlo: «Los grupos de generación que tenían que haber controlado la tensión y que eran retribuidos para ello no absorbieron toda la energía reactiva que debían, no contribuyeron a controlar la tensión».

Ahora bien, no dijo cuál fue la causa, simplemente dio a entender que incumplieron sus obligaciones. Expertos en el sector eléctrico consultados por OKDIARIO explican que no es creíble que dejaran de hacerlo porque quisieran y que estas centrales síncronas (gas, nuclear, carbón e hidráulica) tienen una gran capacidad para absorber excesos de tensión. Por tanto, sostienen que la explicación es que no había suficientes centrales activas y, por tanto, no pudieron contrarrestar las perturbaciones del día del apagón.

Evitar indemnizaciones

Ahora bien, mantuvo el relato para el que buscó la complicidad de las eléctricas, a lo que éstas se negaron, como informó en exclusiva OKDIARIO. Ese relato consiste en que el apagón se debió a múltiples causas -«multifactorial», dijo concretamente Aagesen- y, por tanto, no se le puede achacar a un solo actor, ni siquiera a Red Eléctrica.

Esto se debe a que los protocolos de actuación y los criterios de seguridad de REE establecen que el sistema tiene que ser capaz de soportar la caída de una instalación de generación: es lo que se conoce en la jerga como N-1. Este relato gubernamental sostiene que fallaron tres instalaciones, es decir, hubo un N-3. Y, en consecuencia, no es responsabilidad de Red Eléctrica.

Esto es muy relevante, puesto que, si no se la puede considerar responsable, tampoco tendrá que afrontar las multimillonarias indemnizaciones que probablemente se van a solicitar por las pérdidas ocasionadas por el apagón.

Algo que los expertos citados ponen en duda porque ese N-1 implica que el sistema debe estar preparado para la caída de la fuente de generación más grande (la interconexión con Francia, 2.800 MW) y que, por tanto, tiene que poder soportar múltiples fallos de centrales pequeñas que no alcancen ese nivel; según el propio relato de Aagesen, las tres perturbaciones que provocaron el apagón sumaron 2.200 MW.

Lo último en Economía

Últimas noticias