El año 2025 es de ensueño para el Real Madrid Castilla. El filial blanco derrotó por 2-0 al Atlético Sanluqueño en el Di Stéfano y está a tres puntos de los playoffs de ascenso. Los pupilos de Raúl González Blanco no saben lo que es perder este año (cuatro victorias y un empate).
Además, el Castilla pudo contar nuevamente con un Gonzalo García estelar. Después de firmar un póker ante el Algeciras, de meter su primera diana con el primer equipo blanco en Copa del Rey ante el Leganés, el ‘7’ del Castilla vuelve a demostrar que la tercera categoría del fútbol español le queda pequeña con un doblete.
El máximo artillero en un curso de la Primera RFEF (desde su implantación en 2021) es Rodri Ríos, con 20 goles. En este caso, Gonzalo lleva 21 tantos anotados en 22 encuentros esta presente temporada. A falta de 15 jornadas por disputarse, con una media de 0,95 goles por partido, si la regla se mantiene, el madridista podría gastar otros 14 dianas y acabaría entonces la fase regular con un total de 35 goles en 38 jornadas.
El Castilla controla, pero no marca
La primera ocasión del Real Madrid Castilla llegó a los siete minutos del partido. En un córner de David Jiménez, el cabezazo de Borja Alonso rozó el travesaño de Samu Pérez. El canario quiso encontrarse con el gol después de recopilar dos asistencias desde que volviera de su larga lesión.
Antes de llegar al cuarto de hora, el héroe de Leganés, Gonzalo García, no estuvo lejos de abrir la lata para el Castilla. En un error defensivo del Sanluqueño, el ‘7’ blanco mandó un zapatazo justo por fuera de la portería rival.
El Sanluqueño no olía el balón porque el Castilla no dejaba de acosar a su rival. En un sinfin de ocasiones, los canteranos blancos ejercieron una constante presión sobre su rival. Manuel Ángel y Borja Alonso avisaron desde fuera del área.
Yusi y Víctor Muñoz pusieron al servicio del filial sus cualidades de puñales, multiplicando las carreras y los centros por el costado zurdo. A pesar de tener el control absoluto del partido, los madridistas no lograron anotar en los primeros 45 minutos. Mención de honor también a la pareja de zagueros Ribes-Rivas, que no les tembló el pulso en ningún momento. 0-0 y al descanso.
El mismo de siempre
A la vuelta de los vestuarios, el Sanluqueño empezó como había acabado la primera parte. Con el control del esférico y presionando cada vez más. Sin embargo, la defensa blanca junto a un Mario de Luis atento en su línea, frustraron las intentonas del conjunto gaditano.
Un futbolista que tenía hambre, muchísima hambre, fue Borja Alonso. Después de una lesión que le privó de pisar el césped durante más de 139 días (volvió ante el Betis Deportivo), el canario ha regresado en una forma estelar. Después de tener dos claras ocasiones en la primera parte, el canario volvió a tener dos acciones muy peligrosas en cuestión de segundos. Antes de llegar a la hora de juego, Borja cazó dos centros de Yusi. Su primer remate se encontró con el travesaño y el segundo, Samu Pérez lo despejó de forma providencial.
Sin embargo, finalmente Gonzalo se encargaría de marcar otra vez. Después de firmar un póker ante el Algeciras y de meter su primera diana con el primer equipo en Copa, el ‘7’ del Castilla hizo de nuevo de las suyas. Al igual que hiciera entre semana en el torneo del KO, Gonzalo volvió a anotar de cabeza y Samu Pérez no puede hacer nada esta vez. Y, como si fuera poco, antes de llegar al 80′ del partido, el canterano blanco provocó un penalti que el mismo anotaría para firmar un doblete para reventar aún más su récord.
