La vuelta de Messi al Barça: mucho ruido y pocas nueces
El Barcelona sigue alimentado la posibilidad de fichar a Leo Messi pero las opciones de poder contar con él son económicamente mínimas
Messi está indignado con el Barça por los globos sonda que lanzan sobre su regreso
En las últimas semanas se viene especulando mucho con el futuro de Leo Messi. El argentino afronta su último año de contrato con el Paris Saint Germain y las negociaciones por su renovación están en punto muerto, no de no retorno, pero sí estancadas. Especialmente tras la sonora pitada que se llevó en el último partido de los parisinos. El Barça olió la sangre y se lanzó en otro intento desesperado por contar de nuevo con el 10. Pero la vuelta de Messi es como el dicho, mucho ruido y pocas nueces.
Si hace unos pocos días era el Kun Agüero el que dejaba la pelota en el tejado de Messi y el Barça con unas declaraciones que sorprendieron a todos, en las que decía que «Leo debería retirarse en el Barça porque Barcelona es su casa, tendría que acabar su carrera aquí; creo que Laporta debe de intentar traer a Leo y, si Laporta da un paso al frente, Messi vuelve al Barcelona: ahora mismo la cosa está en un 50-50».
Joan Laporta no dudó en recoger la pelota y lanzársela a Messi horas más tarde: «Messi sabe que tiene las puertas del Barça abiertas. Veremos. Tengo que encontrar la manera de mejorar la relación actual entre Messi y el Barça». Y es que al Barça le interesa mantener entreabierta esa puerta aunque sabe que no podrá abrir y dejar entrar al argentino.
El Barcelona tiene en estos momentos muchos frentes abiertos y problemas que dificultan la vuelta de Messi y casi cualquier operación que se planteen. La explosión del Caso Negreira y todo lo que está generando en el club en las últimas semanas también cuenta, principalmente por la inestabilidad que se respira.
Messi está en estos momentos en un momento de contemplación, atento a cada movimiento y pensando muy bien qué hacer con su futuro. Su contrato expira en unos meses con el PSG y por el momento no ha dado el sí quiero a la renovación que le han planteado, dejando todas las posibilidad y frentes abiertos de par en par, evidentemente con el Barça en la lista.
Pero la salida de Messi del Barça, terriblemente traumática por parte del argentino, donde se sintió engañado y empujado a marcharse por parte de Joan Laporta y su directiva, generó una ruptura completa entre ellos. En estos momentos no hay relación y el presidente lo sabe, y es lo que separa al argentino del Barcelona, aunque no es el único.
Pero es que un paso al frente del Barcelona tampoco cambia nada, porque aún Messi tendría que decir sí a la oferta que pudiera presentarle el club. Una propuesta que llevaría directamente al último punto de este embrollo de mucho ruido y pocas nueces. El aspecto económico es otro factor que echa para atrás la operación. El Barça está en un punto en el que aún debe hacer una fuerte reestructuración salarial, reducir su masa en 200 millones para poder hacer viables otras operaciones, la primera la de un Gavi que vuelve a ser futbolista del filial.
El Barça tiene que efectuar antes de nada una importante rebaja salarial de su plantilla y alguna que otra importante baja en forma de traspaso que reporte dinero a las arcas para seguir cuadrando cuentas. De hecho, ya se especula con que a los jugadores a los que se contacta, se les abre la posibilidad de no lograr encajarlos en el límite salarial, les cederían… Y es que sin esto, todo lo que se rumoree de Messi, es ruido.