El Real Madrid se mete en semifinales sin sudar

El Real Madrid se dio un paseo en Manresa. Los blancos accedieron a las semifinales de la Liga Endesa sin prácticamente sudar ante un meritorio rival plagado de bajas y que sucumbió ante el acierto anotador de los blancos.

Facundo Campazzo consiguió 27 puntos de valoración liderando a un Madrid que mandó en el partido desde el primer segundo y que en ningún momento pasó apuros. La confianza de los blancos se empieza a restablecer tras el mazazo de la Final Four de Vitoria.

Si bien hay que admitir que los visitantes comenzaron muy concienciados el partido. Los chicos de Laso se aplicaron en defensa abanderados por las manos rápidas de Campazzo para firmar un parcial inicial de 0-10 ante la atenta mirada de Pep Guardiola en las gradas. Quizá la presencia de un antimadridista reconocido como el de Santpedor hizo que los blancos no bajasen el pistón en la primera mitad.

Los blancos fueron incrementando su ventaja poco a poco con una enorme intensidad bajo el aro. La consigna era clara y consistía en ser más intensos que el equipo local, vaya que se creciese impulsado por un Nou Congost lleno hasta la bandera. Los blancos establecieron el 11-35 en el marcador a medio del segundo cuarto y a Joan Peñarroya no le quedó más remedio que hacer un cambio radical que funcionó un rato.

La zona del Manresa permitió un parcial de 9-0 para los catalanes hasta que Laso decidió sacar a un Carroll en versión francotirador para que los blancos se marchasen a los vestuarios con un 50% de acierto en triples y 19 puntos de renta.

El Manresa bastante tenía con seguir luchando ante un Madrid que siguió penalizando a los de Peñarroya hasta límites insospechados. Los chicos de Laso veían el aro como una piscina desde la línea de tres puntos con un excelso Campazzo que anotaba cuatro de cuatro al término del tercer periodo para estirar la renta hasta los 26 puntos. «Que acabemos con dignidad, de ganar nada», se resignaba Guardiola en una entrevista durante el encuentro.

El Madrid, justo ganador de la eliminatoria, dejó a Manresa maquillar el marcador en los últimos minutos permitiendo un parcial de 19-4. Los blancos no han gastado mucho en esta eliminatoria y llegarán mucho más frescos que el ganador del duelo fratricida entre Unicaja y Valencia, que todavía tiene que resolverse en el tercer encuentro.