El Oporto golpea primero
El Oporto toma ventaja tras imponerse a la Juventus por 2-1 en el partido de ida de octavos de final disputado en Do Dragao. Taremi y Marega marcaron para los lusos y Chiesa mantiene viva a la Juve con un gol en los últimos compases del encuentro. Cristiano apenas apareció
El Oporto se ha impuesto a la Juventus por 2-1 en el partido de ida de los octavos de final de la Champions League, y toma ventaja en la eliminatoria después de un mal partido del cuadro italiano en el que Cristiano apenas apareció. Dos goles de Taremi y Marega al inicio de cada tiempo permiten a los de Conceiçao golpear primero, aunque el tanto de Federico Chiesa da vida a la Juve de cara a la vuelta en Turín dentro de unas semanas.
Los pupilos de Andrea Pirlo se marchan tocados de Do Dragao tras un partido para olvidar, en el que su estrella no pudo aparecer. Cristiano lo intentaba pero la Juve no conseguía encontrarle y el Oporto cerraba muy bien los espacios para impedir que pudiera recibir. El partido se torció desde el principio con el gol de Taremi en el minuto uno tras un grave fallo de Betancur, que cedió corto para Szczesny y el futbolista del Oporto se lanzó para taponar el despeje y logró que el balón le rebotara y se colara en el fondo de la portería.
A partir de ahí el Oporto se mostró muy conservador y se limitó a intentar mantener la portería a cero, pero sin meterse excesivamente atrás. La primera mitad dejó mucho que desear, la Juventus tuvo una nula producción en ataque y los lusos se marchaban con ventaja al descanso. A la vuelta de vestuarios el cuadro local tardó 30 segundos en anotar el segundo, obra de Marega, que dejaba muy tocada a la vecchia signora. Pirlo tardó en reaccionar pero lo hizo. Movió el banquillo y dio entrada a Morata.
La entrada del ex del Atlético avivó algo el ataque de una Juventus apagada. El Oporto estaba muy sólido y parecía muy complicado hacerle un gol. Entonces apareció Chiesa para reducir distancias y anotar un tanto que vale oro y deja vivo al cuadro italiano. A partir de ahí la Juve se creció un poco, Morata falló un mano a mano y Cristiano reclamó un penalti. Finalmente el 2-1 no se movió y los lusos toman ventaja, aunque el gol de Chiesa devuelve el favoritismo al cuadro dirigido por Andrea Pirlo.