Nadal cede ante Thiem en un partidazo y se complica la vida en el Masters
Dominic Thiem se impuso a Rafael Nadal en el segundo partido del manacorense en la Copa Masters (7-6, 7-6). El manacorense no dio con la tecla en los momentos clave de encuentro y se obliga a ganar a Tsitsipas en el último partido del grupo
Rafael Nadal no pudo sumar su segunda victoria en la Copa Masters y se complica la clasificación para semifinales del torneo de maestros. El manacorense se desinfló ante Dominic Thiem, en un partido marcado por la inspiración del austriaco en los momentos y los errores, dentro de un partido de nivel altísimo, del tenista español, que tendrá que ganar a Tsitsipas para verse en semifinales.
La explosión de Thiem y el mantenimiento de Nadal en niveles de excelencia ha convertido el duelo entre ambos en un clásico que todavía no lo es tal. Resulta familiar pensar en un cruce directo entre Dominic y Rafa, pero la realidad es que el último partido data de enero, con un triunfo del austriaco en el Open de Australia.
El segundo duelo de 2020 entre Thiem y Nadal, por tanto, se vería con la clasificación a las semifinales de la Copa Masters en juego. Ambos habían cumplido en el primer encuentro con sendas victorias ante Tsitsipas y Rublev y un nuevo triunfo les colocaría muy cerca o matemáticamente dentro de la fase decisiva. Se esperaba tenis del bueno y ambos contendientes cumplieron con su parte.
El primer set tuvo de todo menos breaks… ni pelotas de break, de forma incomprensible. Tanto Nadal como Thiem apretaron de lo lindo en cada oportunidad al resto, pero la solidez y ciertos fallos no forzados permitieron que el tanteo continuara con su cauce habitual. Rafa estuvo cerca de romper en más de una ocasión, pero con 4-4 y servicio, un 0-30 le puso en jaque y obligado a una reacción maestra para mantenerse en pie en el parcial.
Primer tie-break para Thiem
Thiem hacía lo propio para igualar a cinco y de nuevo, el servicio permanecía a buen recaudo hasta llegar a la muerte súbita, que decidiría al ganador del set en el torneo en el que más importa. Rafa tomó las riendas a base de experiencia y talento, y se colocó con un 5-2 que le dejaba en el balcón de la victoria, pero tres estacazos de Dominic volvían a igualar la contienda. Nadal se imponía para contar con una pelota de set al servicio, pero un error inesperado le iba a condenar. Thiem, activado en su estado de máxima efervescencia y el set se marchaba al bando austriaco.
Nadal necesitaba hacer borrón y cuenta nueva en cuanto a sus sensaciones finales, toda vez que su tenis sí había sido el apropiado durante el grueso del primer set. El manacorense, con una mentalidad a prueba de bombas, sacó fuerzas de flaqueza en los siempre importantes primeros juegos, en los que resistió e incluso asustó medianamente a un Thiem que parecía tocado por una varita en los momentos clave.
Locura, calidad extrema, y victoria de Thiem
Así pudo el centroeuropeo levantarse de un break brillante de Nadal, realizar el contrabreak e incluso contar con tres pelotas de partido al resto en el siguiente juego. El partido, una auténtica locura, daba un nuevo vuelco con tres pelotas de partido salvadas por el español, que en su faceta de superhéroe mandaba el encuentro a la fase decisiva, de nuevo con los mínimos detalles presentes y decisivos para conocer al ganador.
Thiem comenzó esta vez mejor la muerte súbita, dentro de una igualdad manifiesta, y al contrario de lo que sucedió en la primera manga, el líder del tie-break ya no iba a frenar. De nuevo inspirado a niveles estratosféricos, el austriaco completaba su ristra de winners para levantar los brazos y meterse con una candidatura privilegiada en la lucha por el Masters. Nadal deberá seguir peleando por entrar en semifinales.