«Para los Juegos elegiré un equipo, no los 12 jugadores de más talento»

Sergio Scariolo no ha perdido la satisfacción que le dejó ganar el EuroBasket más increíble conseguido por España. Nos recibe en Málaga, su segunda casa, sentado en una grada de la Escuela Deportiva de los Guindos. Su hijo Alessandro está jugando un partido con los cadetes de Unicaja contra El Palo. Intenta mantener un semblante tranquilo junto a su esposa la ex internacional Blanca Ares, aunque la profesión va por dentro. Sergio nos llama a capilla y habla con absoluta tranquilidad más de media hora. Es un hombre que disfruta conversando sobre baloncesto. Podría pasarse horas. Al fin y al cabo es su hobby y su oficio.

¿Cómo lleva la digestión del triunfo en el EuroBasket?

En el contacto con la gente es donde más se nota -no ha parado de dar besos y chocar manos desde que entró en el pabellón-. Te das cuenta de la dimensión que ha tenido el campeonato cuando vuelves a casa. La gente te cuenta lo que ha sufrido, lo que ha disfrutado y eso es una suerte que tenemos. Es un privilegio que dedicarme a mi pasión y a la vez conseguir dar alegrías a la gente.

¿Por qué este empeño de Francia en manchar los éxitos del deporte español?

Nadie nos ha manchado el éxito porque ha sido tan brillante, tan espectacular, que nada lo puede haberlo manchado. No se puede hablar de Francia en concreto, sino de algunas manifestaciones aisladas obviamente antideportivas, pero no se puede generalizar de que todo un país está en contra. No es la manera correcta de interpretarlo.

Pero no sólo Le Monde ha tirado dardos contra el deporte español…

Yo me pongo en papel de mi colega-rival (Vincent Collet). Polonia en cuartos de 2009, Lituania en la final de 2011, Londres en cuartos de 2012, las semifinales del EuroBasket de 2015 y en tu país… Uno sentiría frustración y lo mismo que puede expresa él hablando de los árbitros después del partido. Seguro que lo habrán sentido mucho en las gradas, en la columna de los medios… Humanamente se puede entender porque se habían hecho la boca con nuestras dos últimas eliminaciones para acabar de sustituir a España en el rol de país dominante en el baloncesto europeo. Ellos han percibido esa oportunidad con el Europeo en casa, pero esto todavía no es así. Creo que si el enfoque suyo es buscar excusar a las derrotas y no buscar causas y saber analizar y coger el camino de hacer las cosas que hacen ganar de verdad pues todavía se alejan más de ese momento.

¿Cicatrizó la victoria toda la herida que Francia había hecho en los últimos años?

Nosotros nos planteamos el torneo partido a partido y no pensamos en Francia hasta que eliminamos pasamos de cuartos porque cuando se nos plantó delante Grecia también parecía un escollo superior a nuestras fuerzas según las consideraciones que se hacían. Y en cuanto terminó el partido de Francia tuvimos un momento para saborear la sensación de objetivo conseguido con clasificación directa a los Juegos, pero inmediatamente pensamos que metidos en una final teníamos que ganar como fuera. El equipo estaba muy metido en la competición y no pensó en cómo reaccionaría Francia porque todavía no se habían producido los pitos al MVP. Yo no veo el deporte como un ambiente de venganza, de rencores. Veo un entorno de competición y cuando te ganan tienes que felicitar al otro y viceversa.

¿Será capaz España de asumir que Pau Gasol no es eterno?

Esperemos que el día de la retirada de Pau sea lo más tarde posible. Tengo mis dudas de que la gente sea capaz de asumir que Gasol puede que algún día no esté más con nosotros. Llegará un momento en que haya que entenderlo y aceptarlo para reciclarse. Habrá que reprogramar objetivos diferentes o caminos diferentes intentando acercarse a los mismos objetivos. Dependerá mucho de la evolución de un grupo de jugadores que tiene mucho margen de crecimiento.

¿En qué cargo ve a Pau en el futuro, cuando ya no esté en la cancha?

Yo espero que a Pau le apetezca mantenerse en el baloncesto y espero que el baloncesto sea suficientemente inteligente como para ofrecerle algo que sea a la vez atractivo para él y útil para el movimiento. Mucha energía, mucho talento se ha desperdiciado por no saberlo reciclar de un rol a otro y no sólo en España. Pienso que en Italia, Estados Unidos… existe la tendencia de no entender que tipo de rol puede tener un entrenador o un jugador que dejen esa actividad para poder aportar en otras cosas. Sería de interés de todo el baloncesto, no sólo nacional, que el día en que Pau lo deje pueda mantener una presencia operativa, no sólo decorativa y representativa, siempre que a él le apetezca porque Pau es una persona con tantos intereses también fuera del campo que habría que preguntarle a él también si le apetece cuando llegue el momento.

¿Se ha dado cuenta la gente de que de alguna manera se ha hecho historia?

Las expectativas alrededor del equipo eran pocas; bien por las muchas bajas, por el año pasado o por el inicio que fue complicado. Conquistar cada posesión, defensa, cada ataque, cada balón era un poco diferente respecto a lo habitual. No era un equipo sobrado de talento al que parece que las cosas le salen automáticamente, sino un equipo con ciertas dosis de talento pero que tiene que sudar y trabajar mucho.

«No habrá una puerta giratoria en la que porque toca entren unos y salgan otros»

La lista de Río promete ser la más complicada de su carrera…

Posiblemente, pero siempre creo que mejor poder elegir y tener la pena de dejar fuera a jugadores que podrían tener mucha voz en un campo que tener un ámbito de elección más baja. Es una dificultad diferente. Hay veces que tienes que pensar en los jugadores que pueden encajarte para darte 10 minutos en un momento determinado de un partido y ser útiles; y hay otra situación donde hay jugadores de más talento, pero donde quizá el encaje pueda ser más complicado. Ya veremos porque 11 meses dan para mucho. En este tiempo pueden ocurrir muchas cosas, evoluciones, involuciones, lesiones, todo puede cambiar…

Hay una cosa que tengo clara: las decisiones las tomaré yo tras haber escuchado las opiniones de los que me rodean y que desde luego no habrá una puerta giratoria automática en la que porque toca entren unos y salgan otros. Esto no va a ser así, obviamente hay mucha aportación a la selección durante muchos años que todos tenemos muy presente, yo el primero, pero también hay mucho agradecimiento para los jugadores que este año han complementado perfectamente al equipo consiguiendo ganar el campeonato de Europa más inesperado. Así que hay consideraciones que hacer y serán siempre en función de hacer un equipo, no en función de elegir los 12 con mejor talento, esto lo tengo muy claro y cada vez lo tengo más claro. Esto no es cuestión de ver quien mete más o no, es cuestión de ver quien encaja dentro de una idea de equipo dentro de un rol determinado y seguramente que podrá haber jugadores con más talento fuera y jugadores con menos que estarán dentro porque encajen mejor.

¿Cómo repartirá los roles entre tanto gallo?

Sin entrar en nombres propios, hay un punto de salida que tiene que ser claro: la capacidad, la actitud de poder encajar dentro del rol que pensaré que este jugador pueda tener. Que encaje en el rol que le asigne que pueda ser de gran protagonismo, de menos protagonismo o un rol como el que han tenido jugadores válidos como Vives, Aguilar o Hernangómez de complementar al equipo cuando toca y de no jugar cuando no toca. Los roles son diferentes y tenemos que pensar que los jugadores que creemos que puedan encajar en el rol que se le sugiere con una atención especial a la parte defensiva, que siempre se valora poco a la hora de pensar en los criterios de selección, pero que luego cuando empieza la competición uno se da cuenta de la importancia que tiene. El punto de salida tiene que ser que todo el mundo tiene que tener claro cuál es su rol y ayudar al equipo a ganar está por delante de los deseos protagonismo individual que conlleve que si este protagonismo individual no viene, la actitud no sea la adecuada. Eso lo tenemos todo claro. Tenemos ejemplos nunca muy malos, pero sí regulares, buenos, muy buenos y eso también lo vamos a tener hora de elegir los que vengan.

¿Se ha ganado Sergio Scariolo el derecho a hacer una lista impopular?

Uno no puede pensar que tus decisiones no puedan ser objeto de opinión porque sería antidemocrático y absurdo pensarlo. Por otro lado, una cosa que tengo clara es que los que me influyen en formar mis opiniones son extremadamente pocos. No es una cuestión de un derecho, sino que tú tienes que tener una línea y un criterio y no poder correr detrás de los criterios de lo demás porque es imposible. Así que no se trata de que yo me haya ganado un derecho. O razono en base a mi experiencia e ideas y de los que me rodean a la hora de tomar decisiones o me vuelvo loco porque aquí hay ocho millones de opiniones diferentes.