Indignación en Australia ante la surrealista actuación en los JJOO de una de sus deportistas en breakdance
Más de 15.000 australianos han firmado para que la bailarina pida disculpas públicamente
El primer ministro australiano salió en defensa de la artista olímpica
El país oceánico está dividido por este asunto
Australia está dividida por los cero puntos que obtuvo en los Juegos Olímpicos de París 2024 la breaker Rachael Gunn, conocida como Raygun, quien se hizo viral después de que incluyera durante su participación varios controvertidos movimientos, entre ellos saltos de canguro.
Gunn, de 36 años y quien se clasificó el año pasado para asistir a los Juegos como representante de Oceanía en la categoría B-girl, obtuvo un resultado combinado de 54-0 en los tres combates que perdió contra Estados Unidos, Francia y Lituania durante las competiciones en París.
Los vídeos muestran cómo B-girl Raygun, vestida con el chándal auriverde oficial de Australia, da saltos laterales con las manos juntas como si fuera un canguro, se desplaza sobre sus rodillas levantando los brazos al aire o se contorsiona en el suelo abriendo y cerrando las extremidades. Su llamativa participación no tardó en viralizarse y en convertirse en memes que cuestionan la capacidad de la australiana de llegar a los Juegos de París.
En su defensa, la federación del país austral de este deporte AusBreaking recordó ese martes que la clasificación de Gunn para los Juegos siguió las normas de la Federación Mundial de Danza Deportiva y se ajustó a los estándares del Comité Olímpico Internacional.
Disparidad de opiniones en Australia
Para el afroamericano residente en Australia, Malik Dixon, la actuación de Raygun parece una burla a un baile que considera un «capital de la cultura afroamericana», entre una de tantas quejas expresadas contra la deportista. Gunn parecía que «estaba jugando con la cultura y no sabe lo significativo que suponía estar por primera vez en los Juegos Olímpicos y lo importante que era para las personas que realmente aprecian el hip hop y uno de sus elementos: el breakdance», declaró Dixon a la cadena pública australiana ABC.
Este deporte urbano fue incluido por primera vez en unas olimpiadas en París y su ronda clasificatoria y finales se disputaron entre los días 9 y 10. A diferencia de otras categorías deportivas, el incipiente breakdance no tiene unos estándares marcados, lo que deja mucho espacio a las capacidades de improvisación e innovación para tratar de conseguir una mayor puntuación.
This is Rachael Gunn, she has a PhD in cultural movement and convinced Australia to pay for her trip to the Paris Olympics.
She participated in break dancing and got 0 points.
— BowTiedMara (@BowTiedMara) August 10, 2024
Pero este no fue el único en oponerse al baile de Gunn, ya que más de 15.000 australianos firmaron una petición exigiendo una disculpa de la bailarina con efecto inmediato. La petición exigía «rendición de cuentas y transparencia inmediatas sobre las acciones recientes» de Gunn y la jefa de misión de París, Anna Meares, sobre cómo Gunn ganó la selección para representar a Australia en París.
Se acusaba a la mujer de 36 años de «manipular el proceso de selección para su propio beneficio» para poder ser elegida por encima de otras rompedoras australianas más talentosas, una acusación descrita como «que plantea serias dudas sobre la imparcialidad e integridad del proceso».
Los políticos australianos salen en su defensa
«Exigimos una disculpa pública de Rachael Gunn y Anna Meares por engañar al público australiano e intentar engañarlo y socavar los esfuerzos de atletas genuinos», recoge el comunicado. «También pedimos una investigación completa sobre el proceso de selección, una auditoría de los negocios del Dr. Gunn (su padre) y una disculpa pública mundial a la comunidad de breaking», concluye.
«Condenamos el acoso y la intimidación global en internet contra Raygun. La presión para actuar en el escenario olímpico es inmensa, especialmente contra los oponentes de su grupo particular. Nos solidarizamos con Raygun», subraya AusBreaking en un comunicado publicado este martes.
El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, y otras autoridades y personalidades también han salido en defensa de Gunn, quien trabaja como profesora en la Universidad de Macquarie y es desde hace años aficionados a varias modalidades de baile. Antes de los Juegos, Gunn también participó en los mundiales de breakdance en 2021, 2022 y 2023, además de ganar el año pasado el campeonato de Oceanía.
«Los Juegos Olímpicos consisten en participar, intentarlo, hacerlo lo mejor posible y representar a tu país. Ella hizo todo eso. Creo que algunas de las críticas que ha recibido han sido injustas», dijo este lunes Albanese en declaraciones a medios.
Temas:
- Australia