Los hackers al ver la información que tenía el móvil de Rubiales: «Aquí tenemos un fondo de pensiones»
La trama de Tebas reconoce que el contenido del móvil de Luis Rubiales fue sacado a subasta por HSI
Este hackeo al dispositivo móvil del ex presidente de la Federación fue el origen del 'caso Supercopa'
Tebas intentó sobornar a un empleado de la Federación para conseguir «munición y papeles» contra Rubiales
El teléfono de Luis Rubiales ha sido la piedra angular sobre la que se ha cimentado el caso Supercopa. Al ex presidente de la Federación le robaron, supuestamente, el contenido de su dispositivo móvil el 20 de agosto de 2020 en una operación en la que participó su tío Juan Rubiales y la empresa de ciberseguridad HSI y todo aquello ha terminado filtrado en diferentes medios de comunicación.
«Estos tíos (los de la empresa HSI) cuando volcaron los datos, alguien de ellos vio lo que había allí y dijo: ‘aquí tenemos el fondo de pensiones cubierto’. Así que dijeron ‘nos quedamos con este material, lo ponemos en circulación y lo vendemos’», explicó Gerardo González Otero, el brazo ejecutor de Javier Tebas en la operación del presidente de la Liga para conquistar la Federación Española de Fútbol.
Juan Rubiales, entonces jefe de gabinete de su sobrino, fue el que trajo a HSI a Las Rozas pidiendo a algunos altos directivos de la entidad que volcasen el contenido de su móvil para protegerse de supuestos hackeos que la Federación había sufrido en los meses anteriores. En realidad, el tío quería tener a todo el mundo controlado y abusó de la confianza de Luis Rubiales para tenderle una trampa que es la génesis del caso Supercopa.
El tío cambió radicalmente su actitud con su sobrino hasta tal punto que al día siguiente del hackeo Juan Rubiales fue destituido en su cargo de jefe del gabinete de presidencia, aunque siguió en la Federación dos años más a cargo del museo hasta su despido definitivo por filtrar documentación a los enemigos de Luis.
«Lo han ido ofreciendo a varios periódicos. Además, a mí me consta que hubo por ahí, pues un poco de subasteo… Encima tienen la sede en la calle Trinquete, que manda cojones», aseveró un Gerardo González que no oculta incluso que el contenido del móvil de Rubiales fue ofrecido a la Liga en un momento determinado.
No se sabe quién pagó a HSI, pero el hecho es que los audios acabaron en manos de El Confidencial y El Mundo. Y estos periódicos estuvieron en contacto permanente con la trama de Tebas –como se ha podido ver en los audios– para ir armando las noticias a través de las cuales se formaría la querella de la Supercopa que Miguel Galán presentó el 30 de mayo de 2022 en los juzgados de Majadahonda.
González Otero confiesa el hackeo
Gerardo González Otero.- «Estos tíos (los de la empresa HSI) cuando volcaron los datos, alguien de ellos vio lo que había allí y dijo: ‘aquí tenemos el fondo de pensiones cubierto’. Así que dijeron ‘nos quedamos con este material, lo ponemos en circulación y lo vendemos’».
Gerardo González Otero.- «Lo han ido ofreciendo a varios periódicos, además. A mí me consta que hubo por ahí, pues un poco de subasteo».