"Ha pasado bien la noche"

Gudelj progresa en la UCI: necesitó dos descargas del desfibrilador para salir de la muerte súbita

Hasta en dos ocasiones tuvieron que dar uso al desfibrilador para recuperar el pulso de Dragisa Gudelj en el Córdona-Racing de Ferrol

Dragisa Gudelj
Momento en el Gudelj recupera el conocimiento antes de subir a la ambulancia. (EFE)

Se vivieron momento de auténtico tensión durante el Córdoba-Racing de Ferrol cuando Dragisa Gudelj cayó desplomado al césped, inconsciente. El jugador blanquiverde se recupera en la UCI y «ha pasado bien la noche» como reconocía el propio Córdoba a través de sus redes, asegurando que pronto pasará a planta a tenor de su positiva evolución.

Dragi, el hermano del sevillista Nemanja Gudelj, se desplomaba sobre el terreno de juego a los diez minutos de juego. En un principio se apunta que fue debido a una parada cardiorrespiratoria, previsiblemente debido a una arritmia que ocasionó esa muerte súbita al jugador. Hoy se conoce que el futbolista necesitó hasta dos descargar del desfibrilador para recuperar el pulso.

El Arcángel se congeló a los 10 minutos de juego. Rápidamente se paraba el juego al ver que la caída de Gudelj era anormal, que no se movía y que había perdido el conocimiento. Sus compañeros y rivales se percataron con velocidad y las asistencias médicas del club corrieron al lugar, colocando en posición lateral y evitando que se tragara la lengua. La ambulancia no tardó en aparecer para llevarle al Hospital Reina Sofía. El partido fue suspendido minutos después tras la decisión de entrenadores, futbolistas, equipo arbitral y dirigentes.

Las imágenes de televisión captaban el momento exacto en el que Gudelj recuperaba el conocimiento, ya en la camilla apunto de subir a la ambulancia, completamente desorientado y queriendo levantarse y seguir con el partido. Fueron los médicos los que le agarraron para evitarlo.

Es el Diario de Córdoba el que señala que hasta en dos ocasiones tuvo que ser reanimado con el desfibrilador para que Gudelj respondiera. Los dos hombres claves en todo esto fueron el doctor Segura y su hijo, ambos del cuerpo médico del Córdoba. Fue el primero de estos el que se percató de que estaba en parada cardiorrespiratoria e inició el masaje. Meritoria fue también la carrera del doctor Bretones, que tuvo que correr hasta el interior de El Arcángel para coger el desfibrilador que estaba en uno de los despachos.

Tras una primera descarga del desfibrilador el futbolista seguía igual y fue con la segunda de ellas con la que se consiguió que Gudelj recuperara el pulso. El futbolista también recibió diferentes fármacos para su correcta recuperación.

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