De Gea no para el debate
Puede sonar demasiado duro, pero David de Gea no parece el mismo portero que lleva varios años deslumbrando en la Premier League, siendo año tras año el mejor jugador del Manchester United. El guardameta español no es capaz de frenar el debate de la portería de la Selección, y ante Marruecos volvió a dar síntomas de inseguridad y nerviosismo, en la misma línea que toda la defensa y el equipo en general.
Y es que los números del portero de Illescas en la cita mundialista no están siendo brillantes. Frente al combinado marroquí hizo su primera parada, un mano a mano ante Boutaib que hubiera sido el 2-1 para Marruecos, pero las sensaciones siguen sin ser las mejores. Sin ser responsable del primer gol de los norteafricanos, pudo hacer bastante más. El balón le pasó por debajo de las piernas, aunque estaba vendido tras el error de Iniesta y Sergio Ramos.
Una parada y dos estatuas
Pero con la Selección se sigue sin ver a ese De Gea seguro capaz de hacer paradas inverosímiles y dar puntos a su equipo. En la segunda mitad volvió a dar síntomas de nerviosismo en varias salidas, y después hizo dos estatuas. La primera no fue a mayores porque el disparo de Amrabat acabó estrellándose contra la cruceta, pero en la segunda volvió a quedar en evidencia ante el remate del malaguista En-Nesyri. De nuevo no se puede achacar el tanto directamente a él, pero las sensaciones que deja es que está algo superado por la situación y por la presión.
Y es que los números están ahí. De Gea ha recibido siete tiros entre los tres palos en lo que llevamos de Mundial, en tres partidos. Sólo ha hecho una parada, el mano a mano mencionado anteriormente, y ha encajado cinco goles. Unas cifras que dejan muy a las claras que el meta está lejos de su mejor momento y que obligan a mantener abierto el debate de la portería. Kepa y Reina esperan su turno, pero todo apunta a que Hierro seguirá apostando por De Gea.