De Gea: esta vez no hubo milagro y nueva decepción en Champions
David de Gea no pudo evitar la derrota y eliminación del Manchester United a manos del Sevilla. El partido planteado por Mourinho hizo que el conjunto sevillista dominara en el medio campo, aunque sin apenas profundidad, durante los primeros 70 minutos. El portero español no tuvo mucho trabajo, pues los españoles tampoco se acercaron con peligro a la portería de los red devils.
Apenas un par de flojos disparos sin mucho peligro sobre la meta de De Gea antes del arreón sevillista, que el internacional atajó sin problemas. En los dos tantos de los de Montella, el portero hizo todo lo que pudo. En el primero, Ben Yedder la ajustó demasiado al palo, donde no pudo llegar el portero pese a su estirada. En el segundo, el francés remató solo, en el primer palo y la mano del guardameta fue antológica, aunque el balón terminó entrando en su portería.
Más cerca del Madrid
El resultado deja a David de Gea de nuevo fuera de la Champions. De hecho, las opciones con las que contaba el United eran debidas a la gran actuación que tuvo en el Sánchez Pizjuán. El portero nunca ha pasado de los cuartos de final y, tras dos temporadas alejado de la máxima competición y jugando la Europa League, vuelve a ver como sus aspiraciones por lograr el trofeo más deseado del viejo continente se esfuman. Esta temporada no está siendo la mejor posible para los de Mourinho. Fuera por completo de la pelea por la Premier, pese a ir segundos, la Liga de Campeones era la única baza para salvar el curso.
Queda demostrado de nuevo que la única opción para aspirar a grandes títulos pasa por conseguirlos con la Selección y, a nivel de clubes, por cambiar de aires. El jugador está en la órbita del Real Madrid desde tiempos inmemorables y el gen ganador que lleva dentro le podría llevar a decantarse por firmar por fin por el conjunto blanco.
Los madridistas han recuperado la voracidad desde la llegada de Zidane. Con tres Champions en los últimos cuatro años son los claros dominadores del fútbol continental y esta temporada aún están vivos en una competición en la que se desenvuelven mejor que nadie. El PSG también le quiere, pero el doble descalabro de los de Emery en las dos últimas ediciones de la Champions hace que la opción madridista gane peso.