El físico condena al Real Madrid

Uno de los principales problemas que arrastra el Real Madrid en este arranque de temporada tiene que ver con el estado físico de los jugadores. Muchos de ellos están rindiendo por debajo de lo esperado y las miradas se centran en un hombre: Gregory Dupont. El trabajo del nuevo preparador físico está bajo la lupa en estos primeros meses. Parece que el método impuesto por el francés no se termina de funcionar a la vista de los resultados en este comienzo del curso.

El nuevo miembro del cuerpo técnico de Zinedine Zidane llegó en verano para suplir a Antonio Pintus. El anterior preparador físico del conjunto madridista logró tener a la gran mayoría de los jugadores a tono durante las tres temporadas que estuvo en Valdebebas, gracias a una rigurosa metodología que iba adaptando según las necesidades individuales y colectivas a lo largo de la temporada.

Pintus supo dar con la tecla desde el primer momento, sin embargo Dupont parece que no acierta. El ex preparador de la selección francesa fue el encargado de planificar las duras sesiones de entrenamientos en pretemporada, pero no ha evitado que las lesiones aparezcan. La plaga de bajas que azota al Real Madrid es de las más grandes que se recuerdan en las últimas campañas. Hasta ocho jugadores han sufrido lesiones musculares en este arranque y parte de la plantilla responsabiliza de ello a Dupont.

A ello hay que sumar el estado físico del resto de jugadores. La mayoría de los miembros de la plantilla no está al nivel esperado, al contrario que sucedía en pasadas temporadas, a las que comenzaban el curso en un gran estado de forma. El equipo no tiene aguante para encarar el final de los partidos, algo que dista mucho de lo visto en la anterior etapa de Zizou en el banquillo.

Como se ha visto en los últimos encuentros, los blancos llegan fundidos al tramo final. El cansancio que acusan gran parte de los jugadores es evidente, llegando a perderle la cara al partido. Prueba de ello, está en los tres últimos choques, ante Valladolid, Levante o PSG. Y eso que, frente a los parisinos, los blancos corrieron siete kilómetros menos que su rival.