«Este va a ser el año de Bale, va a tapar muchas bocas»

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Bale celebra uno de los cuatro goles que marcó al Rayo. (AFP)
Miguel Serrano
  • Miguel Serrano
  • Me confundieron con un joven prodigio pero acabé de periodista. Escribo cosas de deportes y del Real Madrid en OKDIARIO, igual que antes las escribía en Marca. También a veces hablo por la radio y casi siempre sin decir palabrotas. Soy bastante tocapelotas. Perdonen las molestias.

«Va a ser el año de Bale, se va a hartar a tapar bocas». Con esa frase, mitad contundente, mitad amenazadora, se resume a la perfección el convencimiento que existe en la cúpula del Real Madrid sobre el rendimiento del galés en el 2016 que está a unos días de comenzar. No es cuestión de confianza, es mucho más, es auténtica fe en que esta será la temporada de la explosión definitiva del crack de Cardiff.

Ninguno de los mandamases de la casa blanca, empezando por su presidente, Florentino Pérez, ha dudado nunca que Bale se acabaría convirtiendo en el heredero de Cristiano. «A Bale, como a todos los jugadores británicos, le ha costado adaptarse y ha tenido lesiones, pero las ha superado y va a acabar triunfando en el Madrid», dicen en el club blanco.

Después de un inicio de temporada marcado por otra lesión en ese sóleo izquierdo que tanta guerra le ha dado, Bale ha recuperado su mejor nivel, su versión de futbolista imparable y con desborde, ese Bale poderoso del Tottenham que ya había ganado el título de mejor jugador de la Premier dos veces con sólo 24 años, algo al alcance de muy pocos –por no decir ningún futbolista– a su edad.

Olvidados sus problemas físicos, Bale ya suma ocho goles en la Liga, una cifra mucho más acorde a su media y más cerca de los guarismos de la BBC: está a tres de Benzema (11) y a cuatro de Cristiano (12). El póker ante el Rayo –el primero en su carrera, ya que sólo había conseguido dos veces un hat-trick– ha permitido al galés reencontrarse con el gol después de un complicado arranque de campaña.

Además, Bale se ha convertido en el mejor asistente de la Liga. A pesar de haberse perdido cinco de los 16 partidos ligueros, el galés suma seis asistencias en el campeonato español y ya ha superado a Neymar y Soldado, los siguientes en la tabla de mejores pasadores. Pero Bale no se conforma. Es ambicioso y sabe que tiene mucho margen de mejora todavía tanto él como el equipo. «Esto es fútbol, no somos robots, pero tenemos que ser más de todo. Lo bueno es que tenemos tiempo para mejorar y vamos a trabajar duro para mejorar», señaló Bale después del encuentro ante el Rayo en el Bernabéu.

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