La curva de la infelicidad de Isco
Algo pasa con Isco. Esa es una pregunta muy manida en los últimos meses en la zona noble del Bernabéu, que está perpleja ante el rendimiento del futbolista. El malagueño atraviesa su peor momento de la temporada y lleva un cierto tiempo en un bache de juego del que no sale. Esto le ha hecho perder su sitio en el once de Zidane y, como ya indicamos en OKDIARIO, si todo sigue igual en la cúpula del club no descartan aceptar las ofertas que lleguen por el centrocampista en el próximo mercado de fichajes.
Porque el rendimiento estelar de Isco ha cambiado de la noche al día y nadie sabe por qué. En el pasado mes de septiembre era uno de los hombres más en forma del mundo (recordemos su exhibición con España ante Italia) pero después de firmar su renovación, el juego del malagueño ha dejado de brillar y eso ha provocado que ya no sea un hombre importante para Zidane. A finales de la pasada temporada y a comienzos de ésta era uno de los jugadores más trascendentes del equipo, pero ahora ha quedado relegado a un segundo plano.
Y eso es algo que ni cuerpo técnico, ni la cúpula ni algunos compañeros entienden. En los años de Carlo Ancelotti ya mezcló partidos sobresalientes con rachas de fútbol inestable y cuando parecía que había explotado como futbolista y que podía marcar un época, de repente la burbuja ha estallado y ha vuelto a ser considerado como un suplente dentro del equipo. Por este motivo, algunos dirigentes del club consideran que se deberían escuchar ofertas por el jugador este verano.
Porque en las altas esferas del Real Madrid no ha gustado nada el evidente bajón de rendimiento que coincidió con su renovación del mes de septiembre y lo que es más importante, su vuelta a las andadas nocturnas. Estos son los principales motivos para ponerle el cartel de transferible si todo sigue así. Y es que también hay que destacar que el mediapunta tiene la oportunidad de revertir la situación si se centra y vuelve a demostrar sus grandes virtudes como futbolista, que sin duda las tiene.
Bajón de juego en 2018
2018 no está siendo el año de Isco y los números lo demuestran. Pese a su evidente bajón de rendimiento, Zidane apostó por él en el duelo de ida de octavos de final ante el PSG disputado en el Bernabéu pero el andaluz no pudo responder a la confianza del técnico con un partido notable. Y es que en los 9 partidos de Liga Santander que ha disputado en el presente año, sólo ha conseguido anotar un gol y repartir dos asistencias (a esto hay que sumar un gol ante el Numancia en Copa del Rey).
Estos números están muy lejos de los cuatro goles y dos pases de gol repartidos entre la jornada 7 y 11 del presente campeonato doméstico. Después de jugar ocho minutos en El Parque de los Príncipes, ante el Eibar fue titular y volvió a demostrar que está muy lejos de ser aquel jugador que enamoró hace unos meses. Por el bien del fútbol español y del Real Madrid, que regrese. Si esto no sucede, su futuro puede estar lejos de la capital de España. Y todo ello con el Mundial de Rusia, que puede ser su primer gran torneo con España, en el horizonte.