Clos Gómez, el Aytekin español, vuelve al Camp Nou tras el Clásico para pitar el Barça-Sevilla
La Liga y la Real Federación Española de Fútbol ya ni siquiera disimulan. Con los datos sobre el dopaje arbitral del Barcelona más en carne viva que nunca, a saber, un penalti en contra y una roja en los últimos 72 partidos de Liga, el Comité que dirige Sánchez Arminio ha tenido el descaro de designar a Clos Gómez, sí, Clos Gómez para dirigir el decisivo Barcelona-Sevilla de la jornada 30 de Liga.
Clos Gómez volverá al Camp Nou después del arbitraje que perpetró en el Clásico, en el que dio validez a un gol ilegal de Luis Suárez, que estaba en fuera de juego, y no pitó ninguno de los cuatro penaltis que le hicieron al Real Madrid en el área azulgrana. Aún se desconoce si el colegiado aragonés hará también el saque de honor antes de arbitrar el partido.
En el Real Madrid tenían muy claro que les daba «más miedo Clos que Messi» y su arbitraje en el Clásico demostró que los jugadores de Zidane tenían razón. Pocas veces se han visto arbitrajes tan parciales como el de Clos Gómez, aunque con Clos Gómez con el pito en la boca el Real Madrid ha tenido arbitrajes parciales y calamitosos como en varios derbis, incluida una final de Copa en la que expulsó a Cristiano y Mourinho, el partido de los trece errores ante el Sevilla o la expulsión injusta de Kaká en un partido en Pamplona.
El Barcelona, sin embargo, tiene en Clos Gómez a su Aytekin español. Los datos de Clos con el Barça son sencillamente apapullantes: 21 partidos ha dirigido el colegiado aragonés a los azulgranas con un balance inmaculado de derrotas: 17 victorias y cuatro empates. Menos mal, para el resto de los rivales, que Clos se retira este año.