El verdiblanco se retira a sus 41 años

Las cinco escenas más cómicas de la carrera de Joaquín

Joaquín Sánchez
Joaquín Sánchez y Julio Baptista.
Kike Sáez

Joaquín Sánchez anunció su retirada como futbolista profesional a final de temporada. El capitán bético colgará las botas a sus 41 años, en los que en su trayectoria como jugador ha dejado momentos inolvidables. Uno de ellos sucedió tras la victoria del Valencia en la final de la Copa del Rey de 2006. Aquel día posó desnudo junto a la copa y dejó una mítica fotografía para el recuerdo.

Años más tarde, repitió la escena cuando conquistó la misma competición con el equipo de su vida, el Betis. En su segunda etapa como futbolista del equipo verdiblanco dejó otro momento único. El extremo imitó el mítico discurso del que fuera el presidente de la entidad sevillana en su primera etapa, Manuel Lopera, y repitió dos de sus frases inolvidables: «Estábamos en la UVI» y «Hemos fichado a Denílson».

Su época en el Málaga siempre se recordará, además de por sus éxitos, por la mítica conversación con su antiguo compañero Julio Baptista. Los futbolistas fueron interrogados acerca de sus gustos, pasiones y hobbies. El gaditano, al ser preguntado por uno de sus hábitos, dijo que le gustaba jugar al tenis. Su compañero rápidamente le dijo entre risas: «No ha jugado al tenis en su vida y dice el tenis», a lo que este respondió: «No sé ni coger una raqueta ‘Hulio’».

En todos los equipos por los que pasó el gaditano dejó su huella. Esto no fue distinto en su etapa en la Fiorentina, donde se atrevió a hablar italiano en una de sus entrevistas a pie de campo después de un partido de la Serie A. El bético no tuvo ningún tipo de reparo en ser él quien compareciera al término de aquel encuentro, algo que siempre se recordará por su habilidad para mezclar el italiano con su lengua natal, el castellano.

Pero si por algo destaca Joaquín es por su alegría. Él mismo reconoció que cuando era un chaval «salía más que el camión de la basura». Una de sus fiestas la celebró junto a sus compañeros del Betis, en una noche de Halloween. Aquel día, se reunieron para hacer una cena de equipo en el chalet de Benjamín Zarandona.

La fiesta se les fue completamente de las manos y acabó con Lopera sacando de la cama al entonces técnico Juande Ramos para hacer acudir a una velada en la que Denílson casi salta por un balcón. «Estaba previsto que vinieran unas 40 personas, pero se fue corriendo la voz y…», señaló el propio Benjamín unos años más tarde.

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