Liga Santander: Atlético de Madrid - Betis

De cabeza a la Champions

El Atlético de Madrid selló su clasificación para la Champions League después de imponerse al Betis, en un encuentro marcado por las intervenciones del VAR y el tanto de Diego Costa, que apareció cuando menos se esperaba el triunfo de un equipo que tenía uno menos por la dudosa expulsión de Mario Hermoso

Atlético de Madrid Betis
Nacho Atanes
  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

La Champions League volverá al Metropolitano la temporada que viene. Aún con la ilusión candente por la posibilidad de triunfar en Europa en este 2020, el conjunto colchonero aseguró, no sin dificultad, su pase para la edición de 2021. El Betis fue un más que digno escollo para un conjunto colchonero mermado por las correcciones del VAR y al que Diego Costa rescató con un heterodoxo remate, de cabeza y hombro, cuando la heroica aparecía como única solución tras la expulsión de Mario Hermoso.

El susto pre confinamiento de la Champions para el Atlético parecía solucionado, pero aún quedaban tres jornadas para confirmar la presencia de cara a la próxima temporada en la máxima competición continental, sin pasar por la obligación de ganarla para repetir. El Betis parecía un rival idóneo, sin jugarse nada, pensando en la formación de la plantilla para la próxima temporada y con un entrenador interino que ni siquiera ejerce con normalidad, pero la calidad de la plantilla verdiblanca invitaba, cuanto menos, a currarse la victoria.

El Atleti salió al tran tran, en unos primeros minutos que, como se ha convertido en constante, destacó Marcos Llorente. Acostado a la banda derecha pero influyendo también en el carril central, la energía del canterano madridista sobrepasó a sus rivales en cada acción de duelo directo, e incluso estuvo cerca de abrir el marcador con un disparo cruzado que repelió con mérito el joven y novedoso meta del Betis, Dani Martín.

La superioridad de plantilla del Atlético es notoria, así como su entendimiento, pero si hablamos de nombres, el Betis cuenta con dos que bien podrían ser titulares en la plantilla colchonera. A partir de las botas de Fekir y Canales, los pupilos de Alexis fueron construyendo y contando con opciones, aunque sin demasiado acierto. El peligro lo ponía el Betis, y los goles el Atleti, aunque estos no subirían al marcador.

Una mano, involuntaria pero mano, de Marcos Llorente, impedía que el 1-0 de Correa se convirtiera en realidad. González González fue a verlo al VAR y no tuvo dudas, pero el asistente de vídeo sí tuvo más trabajo minutos después. La jugada requiere mención especial debido a una definición mágica de Morata, de esas que escasean en el catálogo del delantero madrileño. Un golazo que, como ha ocurrido otras veces, quedó en nada debido a milímetros, que demostraban tras tres minutos de revisión la posición adelantada de Álvaro, que se marchaba al descanso con un canto en los dientes y las tablas en el marcador.

Rigurosa expulsión de Mario Hermoso

La mala suerte con el VAR había marcado la primera parte del Atlético y tras la reanudación, a la que entró empanado y con Loren avisando para el Betis, iba a recibir otra de arena en forma de expulsión de Mario Hermoso. El central zancadilleó a Loren sin opción de llegar al balón, pero la expulsión directa pareció exagerada para muchos, pero no para González González, que incluso fue llamado al VAR pero ratificó su decisión tras ver la imagen.

Simeone tenía que retocar el diez, ya sin Hermoso, y dio la alternativa a su zaguero de mayor nivel en estos meses, Felipe Monteiro, sacrificando a Correa. La consecuencia de la expulsión, otra más, era que se quedaba sin cambios en el 61, y obligado a mantener cuanto menos el empate.

La esencia del Atlético, con el repliegue y la solidaridad como señas, hizo acto de presencia de forma irremediable en el Metropolitano. El Betis copaba la posesión y encerraba poco a poco a los del Cholo, de cuya capacidad de supervivencia dependería el resultado del partido. Alexis no dudaba y quemaba sus naves. Joaquín y Emerson, al tapete.

Costa vuela hacia la Champions

La victoria era prácticamente una utopía para el Atlético con poco más de 15 por jugar, pero a la supervivencia innata anteriormente mencionada, se sumaba la fuerza a balón parado que elevó a lo más alto a los colchoneros. El ariete estrella del título de 2014, Diego Costa, aparecía en una falta lateral para anotar, mitad cabeza, mitad hombro el 1-0 que esta vez sí subiría al marcador tras una nueva revisión del VAR. Justicia poética.

El Betis no había dicho su última palabra, después de un gol que colocaba un resultado seguramente injusto, atendiendo a lo ofrecido por los andaluces. El asedio seguía en fondo, pero las formas no eran las mismas, afectados por el golpe de recibir un gol de un equipo que cuenta con uno menos.

Los últimos ramalazos del Betis llegaron en un descuento prolongado, de seis minutos, que fueron tomados como una contrarreloj para el Atlético, con su resultado favorito en la mano y el billete a la Champions en la punta de los dedos. La desesperación venció a los verdiblancos y se alió con los colchoneros, que ataron un triunfo de equipo grande y se aseguran un año más que el himno de la competición más deseada vuelva al Wanda después de verano.

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