El Barcelona se da un homenaje
El Barcelona venció 4-0 a Osasuna en el Camp Nou en el partido correspondiente a la jornada 11 de la Liga Santander. Braithwaite, Griezmann, Coutinho y Messi hicieron los goles
El Barcelona se impuso claramente y con comodidad por 4-0 a Osasuna en un partido en el que fueron superiores desde el primer minuto. Este triunfo permite a los de Ronald Koeman recuperar las sensaciones en la Liga Santander y no terminar de descolgarse de las opciones a título. Braithwaite, Griezmann, Coutinho y Leo Messi, que homenajeó a Maradona, hicieron los tantos de los culés.
Sin margen de error. Así llegaba el cuadro azulgrana al partido ante Osasuna. Es evidente que los hombres de Ronald Koeman no están dando la talla en la Liga Santander y ha comenzado a abrirse una brecha entre el Barça y los equipos de arriba de la tabla que empieza a preocupar. Por ello, la victoria era una necesidad de primer orden. Es por eso que el técnico holandés que salió con un once muy ofensivo: Ter Stegen; Dest, Lenglet, Mingueza, Jordi Alba; De Jong, Coutinho, Pedri; Messi, Griezmann, Braithwaite.
Respetuoso minuto de silencio que se guardó por la memoria de Maradona con un Leo Messi emocionado y con la camiseta de El Diego presidiendo en el palco del Camp Nou. Rodaba el balón justo en el día en que los azulgranas cumplían 121 años de historia y, como es habitual, trataron de controlar el encuentro mientras el equipo rival se replegaba bien a la espera de disfrutar alguna contra con la que hacer daño. Los de Arrasate estaban defendiendo con casi todos los efectivos y obligaban al Barcelona a probar fortuna, en la mayoría de las ocasiones, desde lejos.
De esta forma llegaron varias ocasiones, como una volea de Griezmann que encontró los puños de Sergio Herrera o un disparo desde la frontal del área de Coutinho que acabó en las manos del portero de Osasuna. Ambos futbolistas culés, muy activos, crearon la primera ocasión del partido. Pase en profundidad de Messi al francés, que se regatea al portero y desde línea de fondo se la pone al brasileño, pero Unai García evita el tanto debajo de los palos. Posteriormente se cambiarían los papeles y sería el ex del Liverpool el que asistiría al de Macon, que cruzó en exceso su disparo.
La mano de Messi
Dominaba el Barcelona en exceso con más del 70% de la posesión. Pero como siempre, eso no da la victoria, pero sí ayuda a conseguirla. Y en la primera que los azulgranas cogieron descolocada a la zaga rojilla llegó el primero de la tarde. Pase impresionante de Messi, un cambio de banda con tintes de un pase en profundidad, para Jordi Alba. El lateral izquierdo penetra en el área, se la da a un Coutinho que se topa con Sergio Herrera. El rechace le cae a Braithwaite, al que también detienen su disparo, pero ya el siguiente rebote, a trompicones, acaba mandando el balón al fondo de la red mientras el guardameta de Osasuna pedía falta. Mateu Lahoz dio validez al tanto y el VAR lo ratificó un minuto después. Por cierto, mientras entraba el balón a gran altura apareció Messi como un avión y subió su mano, quién sabe si por un acto reflejo o como un homenaje a Maradona y su mítico gol en el 86′.
Antes del gol Osasuna sólo había disfrutado de una ocasión que Budimir remató de manera forzada un centro de Jonny y la mandó por encima del travesaño. El ex del Sporting minutos después tuvo que abandonar el campo por una lesión muscular. Pero al borde del descanso Budimir logró batir a Ter Stegen, pero la acción estaba invalidada. Oier remató en posición antirreglamentaria y el guardameta alemán obró el milagro. De rechace Budimir probó fortuna y el portero otra vez salvó de forma impresionante y a la tercera el ex del Mallorca no falló, pero toda la acción, desde su inicio, estaba invalidada.
El Barcelona consiguió el segundo tanto para irse con un cómodo 2-0 al descanso. Llegó de los pies de Griezmann y fue un auténtico golazo. El francés empaló una volea en la frontal del área tras un despeje de Moncayola. El latigazo de Antoine fue tan fuerte que Sergio Herrera sólo pudo mirar como un misil entraba en su portería. A la vuelta de vestuarios el Barça regresó con una cara nueva: Sergio Busquets. El centrocampista sustituía a un Pedri que estuvo correcto desempeñando las funciones del ‘5’, pero Koeman quería que el internacional español fuera recuperando sensaciones.
Homenaje al ’10’
El equipo visitante salió con más descaro al segundo tiempo, y probaron rápidamente a Ter Stegen. El Barcelona espabiló y seguía buscando un tercer tanto para sentenciar el encuentro. Messi lo intentó con una falta de las que le gustan, pero el cuero se fue por encima del travaseño. En la siguiente no perdonarían los azulgranas. Griezmann le roba un balón a Oier, se la da a Coutinho, que a su vez se la da a Braithwaite. Roncaglia mete el pie y el balón llega a Antoine, que había acompañado la jugada. En lugar de tirar engañó a todos y se la dio a Philippe, que sólo tuvo que empujarla. 3-0 en el electrónico del Camp Nou y la victoria se quedaba en casa.
Koeman vio el momento para mover el banquillo y dio entrada a Junior, Trincao y Dembélé por Dest, Braithwaite y Coutinho. El cuarto tanto llegó de los pies del extremo francés nada más entrar al campo, pero el VAR anulaba el tanto por fuera de juego previo de Trincao, que había asistido al ex del Dortmund. Antes de eso, un disparo de Roberto Torres al palo tras un error garrafal en la salida del balón de Mingueza. Entremedias, Lenglet tuvo que abandonar el terreno de juego por una lesión en el tobillo, haciendo saltar todas las alarmas en Can Barça ante las numerosas bajas defensivas. No se saciaba el Barcelona y quería un cuarto. Messi quería el suyo después de ver cómo todos los de arriba habían visto portería y él no.
Y el destino quería que llegase para que pudiera homenajear a Maradona. El rosarino vio la oportunidad perfecta para soltar un trallazo desde la media luna del área y ponerla en la escuadra y no la desaprovechó. En la celebración se quitó la camiseta y debajo tenía una de Newell’s con el ’10’ que tuvo Diego Armando en el club del que Leo Messi es aficionado desde chico. Beso y manos al cielo de su sucesor. Con el partido resuelto con el 4-0 Osasuna pudo hacer el gol de la honra, pero ahí estaba Ter Stegen. También pudieron Trincao y Messi hacer la manita, pero el tiempo se agotó y los de Ronald Koeman se llevaron tres puntos que tanto necesitaban.