El Barcelona busca un Camavinga a la desesperada
El Barcelona intentará incorporar a un centrocampista 'multiusos' en el mercado invernal para suplir la marcha de Gavi
"Necesitamos un Camavinga", asegura Xavi a sus íntimos ante la falta de físico e intensidad de los Gundogan, De Jong, Pedri y Sergi Roberto
El Barcelona busca la fórmula para hacer ingeniería financiera y esquivar el control económico de la Liga para intentar a la desesperada el fichaje de un centrocampista con el perfil de Camavinga, capaz de jugar en varias demarcaciones para llenar el vacío de Gavi. Xavi insiste en la necesidad extrema de traer refuerzos.
La sonrojante derrota ante el Real Madrid, unida a los decepcionantes partidos que ha perpetrado el equipo de Xavi Hernández en el último mes incluida la reciente eliminación copera frente al Athletic, han llevado al Barcelona a intensificar los contactos en la búsqueda exprés y a la desesperada de un centrocampista para reforzar una zona del campo que se ha quedado coja desde la lesión de rodilla de Gavi.
El Barcelona hace cuentas para un ‘sustituto’ de Gavi https://t.co/jN8A89sEPW
— okdiario.com (@okdiario) December 26, 2023
«Necesitamos un Camavinga», ha trasladado Xavi Hernández a Laporta y a Deco en varias de las reuniones de planificación deportiva que han mantenido los responsables del club azulgrana. El problema para el Barcelona es el de siempre: su dramática situación económica que no le permite incorporar a futbolistas salvo que diera salida a alguno de los que no cuentan para el técnico culé.
Las salidas, a dos semanas para que se cierre el mercado, parecen bloqueadas, porque los jugadores que cuentan menos para Xavi Hernández se aferran a sus contratos y ni quieren irse ni tampoco les sobran pretendientes que les reciban con los brazos abiertos. La baja de larga duración de Gavi permitió al Barcelona acelerar unos meses la llegada de Vitor Roque, pero el brasileño es un delantero que no resuelve las carencias del equipo azulgrana en el mediocampo.
Huérfanos de Gavi
La ausencia del internacional de Los Palacios ha resultado para el Barcelona mucho más dañina de lo que se presumía en un principio. Ni siquiera el regreso de Pedri se su última lesión ha conseguido aliviar los problemas que tiene el equipo de Xavi Hernández en la sala de máquinas, precisamente donde se cocina el juego y se ganan los partidos.
Sin Gavi el Barcelona pierde impulso, físico y vigor. Nadie presiona como él y nadie se ofrece tampoco como Gavi cuando sus compañeros tienen la pelota. Los cuatro centrocampistas puros del Barça, que fueron titulares ante el Real Madrid, la quieren siempre al pie y eso ralentiza demasiado el juego del equipo.
Además, ni Gundogan, ni De Jong, ni Sergi Roberto, ni Pedri son grandes recuperadores de balón, por lo que el Barcelona se queda partido cuando pierde la pelota y los defensas están demasiado expuestos a las contras de los rivales como se vio en el Clásico de Riad, donde la velocidad de Rodrygo y Vinicius trituró a la zaga azulgrana ante la pasividad de sus centrocampistas.
Por si fuera poco Oriol Romeu ha demostrado que le viene muy grande la camiseta del Barcelona y que una cosa es jugar bien en el Girona y otra muy distinta soportar la presión de un club grande como el azulgrana. Por no hablar de que la sombra de Busquets es demasiado alargada como para que no se notara la ausencia del mediocentro que ha sido el tapón de la bañera azulgrana casi tres lustros.
Xavi está desesperado
Por eso Xavi Hernández busca un futbolista del perfil de Camavinga, un clon de Gavi, que tenga ida y vuelta, que sepa jugar a uno o dos toques y que aporte al equipo vigor físico e intensidad. No es fácil encontrar ese estilo de futbolista en el mercado y menos en invierno, pero lo que hace casi un imposible satisfacer los deseos del entrenador del Barcelona es la precaria, casi dramática, situación financiera del club azulgrana.
O Laporta se inventa una nueva palanca y Tebas, como otras veces, gira la vista hacia otro lado, o Xavi Hernández se quedará compuesto y sin el centrocampista que ansía y necesita. El Barcelona, con la Supercopa ya perdida, tiene aún la bala de la Copa del Rey, porque la Champions es un sueño que a día de hoy se antoja casi imposible y en la Liga tiene una desventaja de siete puntos no sólo con el Real Madrid, sino también con el Girona. Y ambos equipos le ganaron sus duelos de la primera vuelta.
Si Xavi se queda sin centrocampistas y se queda también en blanco, su futuro como entrenador del Barcelona estará más que cuestionado. A Laporta nunca le enamoró, pero le era muy útil como escudo para alejar de sí los pañuelos y las protestas de una masa social, la azulgrana, que está cansada de vivir tiempos de escasez tan acostumbrada a la abundancia de los tiempos de Messi. Y de Negreira.