Cuatro árbitros desvelan que Hernández Hernández también pagaba al hijo de Negreira por ‘coaching’

Alejandro Hernández Hernández fue otro de los árbitros que pagó al hijo de Enríquez Negreira por los famosos cursos de coaching que impartía. El árbitro canario, uno de los señalados habitualmente por sus polémicas en los Clásicos entre Barcelona y Real Madrid, fue otro de los clientes de Javier Enríquez Romero. Así se desprende de las declaraciones de hasta cuatro compañeros del colegiado ante la Guardia Civil, a las que ha tenido acceso OKDIARIO.

En los interrogatorios en calidad de testigos que ha realizado la Guardia Civil por el caso Negreira, hay al menos cuatro que citan a Hernández Hernández como uno de los supuestos clientes de Javier Enríquez. El hijo del que fuera número dos del arbitraje fue contratado por varios colegiados de Primera y Segunda División para impartirles clases particulares sobre aspectos técnicos y psicológicos durante el tiempo que, tanto él como su padre, estaban a sueldo del Barça.

Este medio ya reveló en exclusiva el nombre de cinco árbitros que contrataron sus servicios, como fueron Alberola Rojas, Jaime Latre o Medié Jiménez, entre otros. Ahora, según revela el testimonio de los testigos interrogados por la Guardia Civil, aparece el nombre del colegiado canario. Los cuatro colegiados que han asegurado que Hernández Hernández tenía a Javier Enríquez como coach son los ya retirados Ignacio Iglesias Villanueva y José Luis González González y los jueces de línea Jon Núñez Fernández y José María Sánchez Santos.

Iglesias Villanueva y González González, que ejercieron hasta la pasada temporada como árbitros de VAR, señalaron que el árbitro de Lanzarote fue uno de los clientes del hijo de Negreira. En la declaración del primero figura lo siguiente: «Preguntado para que diga si le consta que algún compañero haya contratado los servicios de Javier Enríquez, dice que sí sabe de compañeros que han contratado a Javier, como David Medié, Iñaki Vicandi, Javier Alberola Rojas, Santiago Latre, Alejandro Hernández Hernández».

En la misma línea se dirigen los otros tres colegiados. González González le cita junto a Velasco Carballo, que fue el sucesor de Sánchez Arminio al frente del Comité Técnico de Árbitros. Sin embargo, los dos asistentes –Núñez Fernández y Sánchez Santos– señalan que el nombre del canario sale en «una conversación privada» y en «conversaciones que escuchó en su colectivo», respectivamente.

Reconoció ser del Barcelona

Alejandro Hernández Hernández reconoció con 11 años su simpatía por el Barcelona. Apenas siendo un niño, cuando comenzaba su andadura en el arbitraje, afirmó en una entrevista del 11 de junio de 1994 que era del Barça. Años antes de ser profesional y de contratar al hijo de Enríquez Negreira, dejaba entrever cuáles eran sus colores al ser preguntado por su equipo favorito. «Sí, claro, el Barcelona», dijo el canario en aquel momento. Además, señaló a Romario y Laudrup como sus jugadores favoritos. Ambos futbolistas militaban e el conjunto culé en aquel entonces.

Durante la época en la que coincidió que Negreira era número dos del arbitraje y que Hernández Hernández pitaba en Primera División, dirigió un total de 19 partidos del Barça. El balance en ellos fue de 14 victorias, tres empates y únicamente dos derrotas. Entre los escándalos a favor de los barcelonistas destacan los dos penaltis inverosímiles ante el Eibar en la última jornada liguera que pudieron darle el título al Barça en la temporada 16-17. Aquel curso, venía de pitar un Clásico que acabó con triunfo azulgrana y a la campaña siguiente volvió a ser designado para el duelo entre ambos.

Desde que Negreira dejara de estar en el organigrama del Comité Técnico de Árbitros, ha dirigido 14 partidos de los barcelonistas. Mientras que entonces el Barça ganaba el 74% de los partidos, el balance actual es de seis victorias, siete empates y una derrota.

Un árbitro polémico en los Clásicos

La figura de Alejandro Hernández Hernández está ligada, inevitablemente, a la polémica en Clásicos. El colegiado ha pitado un total de cuatro partidos entre el Barcelona y el Real Madrid. El balance es de una victoria para cada uno y otros dos empates. Sin embargo, los errores siempre han ido en una misma dirección: contra los madridistas.

De hecho, en el último que pitó, un empate a cero en el Camp Nou en 2019, dejó pasar hasta tres penaltis cometidos sobre Varane. El más claro de ellos fue un plantillazo de Lenglet en el muslo, pero tampoco señaló dos agarrones sobre el central francés cometidos por Rakitic. En aquel encuentro había otro sospechoso habitual al frente del VAR: De Burgos Bengoetxea.

En el pitado con anterioridad, en 2018, los blancos lograron un valioso empate en un partido en el que tuvo que anular un gol de Messi por una falta de Suárez sobre Varane en el inicio del contragolpe. Según recogió la televisión, el cuarto árbitro le avisó con un «falta de Suárez» en repetidas ocasiones, pero Hernández Hernández se negó a pitarla.

Arbitró un 2-3 en el Bernabéu que terminó con gol sobre la hora de Leo Messi. El Real Madrid acabó con 10 por la expulsión de Sergio Ramos tras una falta al argentino en el centro del campo. Además, no consideró señalar un penalti cometido por Umtiti sobre Cristiano Ronaldo en el primer minuto de juego.

En el único partido entre ambos que el conjunto blanco ganó, estuvo a punto de no hacerlo. Todo debido a un gol que suponía el 1-2 a favor de los madridistas que anuló. Gareth Bale superó en un salto a Jordi Alba para marcar, pero Hernández Hernández consideró que había falta del galés. Pese a ello, el Real Madrid marcaría después para llevarse los tres puntos.