Aston Martin se ve más cerca de Red Bull y alimenta la esperanza de Fernando Alonso

Aston Martin se ha establecido tras las cinco primero carreras del Mundial como la máxima competencia de Red Bull en la parrilla de Fórmula 1. La escudería austriaca ha demostrado durante el primer tramo de temporada que parece inalcanzable, pero el nuevo equipo de Fernando Alonso ha conseguido plantarle cara e igualarle, al menos, en cuanto a fiabilidad. No obstante, desde la cúpula de la marca británica admiten que aún «queda un poco» para superarles.

El director técnico de Aston Martin, Dan Fallows, reconoce que queda «camino por recorrer» para competir en igualdad de condiciones con la el fabricante austriaco. «Tenemos que tener en cuenta dónde estamos en relación con Red Bull. Pero creo que hay áreas en las que creemos que somos relativamente fuertes», afirmó.

«Además, tenemos que optimizar nuestro coche para cada carrera en particular, lo que significa que a veces puede haber aspectos de baja velocidad, curvas de alta velocidad, en los que no somos tan fuertes como algunos otros rivales», comentó Fallows en referencia a las diferencias que se han encontrado dentro de algunas áreas de los circuitos en los que han competido.

Al ingeniero también le preguntaron si veía capaz a su equipo de ganar, al menos, una carrera a lo largo de este Mundial de Fórmula 1 e indicó en qué circuito se podría producir dicho triunfo. «Me encantaría decir que una victoria es posible esta temporada. Obviamente hay algunos circuitos en los que no siempre pasa lo normal, a veces los coches tienen características particulares que pueden dar juego. Por ejemplo en Mónaco, circuitos como ese».

«Pero sinceramente, creo que somos realistas sobre nuestra situación, donde estamos en este momento, nuestra atención se centra realmente en maximizar la cantidad de rendimiento que obtenemos en el coche en el menor tiempo posible. Y ya veremos qué recompensas obtenemos. Sólo queremos aprovechar la velocidad que tenemos y seguir con la misma filosofía», concluyó.